Capítulo 29

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"Te mataré"

Aurora caminaba por los pasillos del castillo cumpliendo sus tareas antes del mediodía. Mientras avanzaba, su mente divagaba en algún plan para poder salir del castillo sin levantar sospechas. La tensión se había vuelto su acompañante, especialmente después del encuentro que tuvo con Lucius. Había experimentado muchos eventos más aterradores que ese, y en sus misiones nunca retrocedía, aunque la amenaza fuera grande. Pero... había puesto en riesgo su embarazo.

La verdad cayó sobre ella como un balde de agua fría: había sido irresponsable al venir al castillo. Porque si Julius estuviese frente a ella, si Julius estuviera muerto... querría que Aurora cuidase su salud y la de su bebé, y que siguiera adelante sin él...

Se secó bruscamente una lágrima que se le había escapado con el dorso de su mano.

De repente, un guardia chocó contra ella, haciendo que algunos de los papeles que el hombre llevaba entre las manos volaran por el suelo. Aurora se tambaleó un poco, sorprendida por el impacto. El guardia se disculpó rápidamente y comenzó a recoger los papeles, pero uno de ellos había caído justo a los pies de Aurora. En el momento en que lo recogería para entregárselo, el guardia se lo metió entre la manga de su vestido. Aurora miró con confusión la punta del papel que se asomaba por la tela del vestido y su brazo, y cuando se levantó para preguntarle al guardia sobre lo que había hecho, éste había desaparecido.

Sintiendo el pequeño papel como si pesara toneladas, siguió avanzando. Limpió el polvo de algunos muebles y posteriormente se adentró en un lavado. Sacó el papel doblado y al abrirlo, descubrió unas palabras escritas a mano. Reconocería esa letra cursiva en cualquier parte del mundo.

Aurora frunció el ceño, sintiendo una mezcla de emociones

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Aurora frunció el ceño, sintiendo una mezcla de emociones. La incertidumbre, la esperanza y el miedo luchaban por el control en su mente. Sabía que este era un mensaje del capitán Yami, indicándole que debía reunirse con él esta noche. El guardia sería su guía para salir del castillo. Sin duda arriesgado considerando el toque de queda impuesto por Lucius, pero no era algo que ya no había hecho antes.

Decidida a descubrir qué es lo que el capitán quería decirle, dobló cuidadosamente el papel y lo guardó en su bolsillo. Continuó con sus tareas, tratando de mantener la calma y el enfoque hasta que anocheciera. Sin embargo, cada rincón del castillo parecía tener ojos y oídos, y Aurora no podía evitar sentirse observada.

En el momento en que iba pasando por fuera de las habitaciones cercanas al dormitorio de Lucius, escuchó un grito ahogado. Aurora se detuvo en seco. Sus ojos se abrieron de par en par al reconocer la voz de Lucius. Se estremeció de pies a cabeza. Eran gritos de dolor, de un sufrimiento desgarrador.

Golpe.

Aurora se digirió hacia la fuente del ruido. Llegó frente a una puerta entreabierta y lo que vio la dejó sin aliento. Lucius estaba de rodillas en el suelo, con su torso desnudo y siendo azotado por garras de sombras que surgían de la oscuridad. Las venas de su frente se marcaban producto del esfuerzo por contener más gritos de dolor. El sonido de la carne siendo rasgada y los gemidos de dolor llenaban la habitación. Su espalda estaba cubierta de sangre.

Cronogravedad | Julius Novachrono [Black Clover]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora