5

148 22 0
                                    

Pov Sana

No, no podía creer que le estaba pasando eso, estaba muy feliz de ver a Momo pero al día siguiente se encontró con alguien más que dañaba por completo su estado de animo.

- Por qué nadie me dijo que él estaba aquí?.- ambas chicas vieron al chico alto y cabello castaño al cual odiaban y conocían muy bien.

- No lo sabía.

- Yo peor ya que no he trabajo aquí.- dijo Momo.

- Bueno si esta aquí es porque mi padre o él anterior jefe lo contrato, quieres que lo despida?

- No, dejalo.

- Estas segura Sana?.- asintió a la pregunta de Momo.

- Eso ya es pasado, yo estoy bien.

En la hora de almuerzo fue a la oficina de Mina junto con Momo ya que no quería toparse con ese chico.

- Gracias por traerme el almuerzo.

- Deberías bajarle un poco al trabajo no tenemos tanto tiempo desde que nos mudamos.

Alguien toco la puerta y todas se miraron, no esperaban a nadie y Mina no pensaba en desperdiciar su almuerzo para hablar sobre negocios.

- Momo puedes ir a abrir.

- Estoy comiendo.

- Yo igual.

- Ustedes dos no pueden hacer un simple favor.- camino a la puerta para abrir y vio al chico que odiaba por lastimar antes a su amiga.- Pasa...- Momo dejo de comer al igual que Sana quien miraba al chico que pensó haber olvidado.

- Estoy en mi hora de almuerzo se puede saber que es tan importante para interrumpir.

- Yo lo siento mucho, vine a dejar mi carta de ausencia.

- Entiendo por eso no te he visto desde que llegue.

- Si, yo daré lo mejor de mi.

- Bueno puedes retirarte.- agarro el papel y él chico miro unos segundos a Sana antes de irse.

No dijeron nada durante el almuerzo, Sana no quería toparse para nada con aquel chico pero el destino tenía una muy buena manera de joder más su día.

- Te vas tarde.

- Estoy esperando a Mina.

- Su amistad es muy fuerte.

- Si, que te trae por aquí? Aquí solo estamos las dos secretarias y la jefa.

- Yo quería disculparme por lo que paso antes.- él chico dijo mirando el suelo no parecía para nada aquella persona que rompió su corazón.- Y quería saber como has estado?

- Estoy bien.- estaba rogando que Mina saliera rápido de la oficina.

- Me alegra por ti, esto es para ti.- en su mano había un caramelo que le gustaba mucho a ambos.

Inconscientemente estiro su mano y lo agarro, recuerda que cada vez que se sentía mal aquel chico le regalaba uno o viceversa, salian corriendo a comprar sin importar llegar tarde a clase eran tan felices.

- Mierda...

- Que pasa? Te duele algo?.- el chico parecía preocupado.

- Nada solo se me olvido apagar la luz del baño de casa.

- Sucede algo?.- Mina por fin salió de su oficina.

- No Señorita Myoui, solo quería hablar con Sana sobre un asunto, ya me voy.- el chico se fue sin decir nada más.

hell in heavenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora