Capítulo 32

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•••Flashback•••

Calvin se acercaba sigilosamente a Olivia, quien dormía en el sofá de su sala abrazando un libro. El chico apuntaba muy seguro con su arma de juguete, había mucho silencio esa noche, avanzó unos pasos más adelante y la detective despertó:

-¡Huh! - se levantó de golpe agarrando el arma del chico - ¡Calvin! - exclamó. Se tomó un momento para respirar. Miró el arma que sostenía, se dió cuenta que era de plástico, se había exaltado por nada, sin embargo, el jovencito le gastó una broma de muy mal gusto - que susto me diste... Nunca apuntes con un arma a un oficial de policía.

-Es de juguete, ¡Solo era una broma! - frunció el ceño e hizo un puchero.

-No lo fue... - meneó la cabeza. Miró el arma, la sostuvo bien, se levantó del sofá - Pero esto si - le disparó chorros de agua, hizo que el niño corriera.

-¡Ay no! No Olivia... - reía. Corrió hasta la habitación donde dormía - ¡Ja, ja, ja, ja! - se tiró a la cama mientras su protectora seguía disparando - ya, me haces cosquillas.

-Ve a lavarte los dientes - se detuvo cuando el agua se terminó, el niño se levantó. Miró el reloj de su muñeca - ya es muy tarde y mañana tienes escuela... Es en serio Calvin.

-Y si mejor me llevas a tu trabajo... Me divierto más allá que en la escuela, ¡Es muy aburrido!

-Ya lo hablamos, tienes que ir a la escuela, debes aprender y en realidad lo aburrido está en la estación.

-Tú podrías enseñarme así no tendría que ir a la escuela, eres muy inteligente.

-Buen intento, jovencito. Anda, ya es tarde.

-Pero tienes que prometer que me llevarás a la estación.

-Esta bien, iremos. Pero tú me tienes que prometer que vas a estudiar.

-De acuerdo.

-Entonces tenemos un trato - chocaron las palmas - se cancela si no te vas a la cama ya - le acarició la cabeza con ternura.

-Ya voy, ya voy - pasó al baño.

-Vendré más tarde y más vale que ya estés acostado - concluyó y fue a abrir la puerta, acababa de sonar el timbre.

•••Final del flashback•••

-Liv... Liv... - llamaba Elliot desde el monitor - ¿Sigues ahí?

-¡Ah! Si... Aquí estoy.

Luego del arresto, el escuadrón volvió a la comisaría. Los detectives se encargaban del procedimiento, mientras tanto, la jefe atendía una llamada vía Skype con su teniente favorito.

-¿Qué fue eso? Tuviste un severo viaje astral.

-Elliot, no te burles.

-No lo hago, solo que me causó curiosidad, ¿En qué estabas pensabas?

-En el hecho de que Calvin hizo que recordara cuando jugamos con una pistola de agua.

-¿En serio?

-¿Recuerdas el día que Dana Lois me buscó para reportar su violación?

-Como olvidarlo. Siempre pasaba algo cuando estaba cerca, esa vez recibí una bala en el hombro, un encuentro más con ella y me mata.

-Ese día... Me quedé dormida en el sofá y él apareció frente a mi, me dió un gran susto cuando lo ví con el arma apuntándome, luego recordé que se la había comprado en una feria en el parque. Jugamos un buen rato.

La Octava CartaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora