"Pecados"
Recorría los pasillos con aquel ángel caído observando los cuadros en las paredes Anoche sintió una sensación extraña, preocupante, algo muy dentro de él le decía que algo no andaba bien.
Si, pasaron ocho años, ocho años en ese infierno y los que faltaban. Pero no era tan malo, Lucifer era su aliado, lo protegía y le asignaba cosas de gran importancia así como algunos trabajos pendientes con algunas almas. Durante este tiempo estuvo oculto de los medios, hasta de los demás hermanos del monarca. Lucifer no creía que fuera prudente, era mejor esperar en el momento adecuado.
Hoy sería el día en el que el monarca lo presentaría. Hizo una promesa e iba a cumplirla, lo ayudaría a ver a esa persona.
—Bien…solo no…no les hagas caso son…una cuerda de locos ¿Ok? Y…aléjate de…olvídalo—Alastor alzó una ceja confundido, pero siguió al ángel caído hacia una gran puerta, detrás de esta se escuchaban unos golpes y ruidos, voces de distintos individuos, nombres y quejas. De repente sintió la presencia de alguien más y sabía bien quién era. La cabra lo miro fijamente y sonrió, luego miro al caído.
—Vaya...¿En serio lo vas hacer?—el ángel caído asintió en respuesta, la cabra hizo una pausa, observo de pies a cabeza al ciervo.
—Mm…es mejor que lo alejes de Asmodeo—dijo la figura abriendo la puerta, cuando la abrió, en la mesa de aquella habitación estaban los pecados capitales. Aquellos individuos se lanzaban comida los unos a los otros, parecían niños peleándose y burlándose del otro…¿Acaso estos eran los supuestos gobernantes de este infierno?
—¡Mierda! ¿Es en serio?—dijo Lucifer con clara molestia, los individuos se detuvieron y todos volvieron a sus asientos como si nada hubiera pasado. La comida estaba regada por todos lados…que infantiles eran…
—Vaya…no se les puede dejar solos ni un segundo—dijo la cabra; Satán. Los otros no dijeron nada.
—¡Vamos! No es nada grave—dijo una mujer, no sabía muy bien que era si…abeja o…un perro. Lucifer suspiró y con un movimiento de su mano el lugar estaba completamente limpio.
—¿Es él?—pregunto otro de ellos, tampoco estaba seguro de que era, parecía un bufon—Si—respondio Lucifer. Alastor sentía una mirada fija totalmente en él, cuando volteó a su derecha se encontró con…tampoco sabía bien lo que era aunque…parecía una especie de gallo. Este mismo individuo lo miraba fijamente con una sonrisa y moviendo sus plumas de atrás de arriba a abajo con calma. Desvío la mirada incómodo.
—Ja…¿Que pasa cervatillo? Te pongo nervioso~—dijo el individuo, la sonrisa de Alastor se arqueó un poco mostrando su incomodidad. Pero se compuso como si nada.
—Para nada, su alteza—dijo como siempre educado y carismático. El individuo soltó una risita y los demás lo vieron como si no fuera nada extraño.
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Caminos Separados: un nuevo comienzo (Radiodust) [Segundo Libro]
Fanfiction«Para poder leer y entender esta historia debe leer el primer libro "Caminos Encontrados"» Para Alastor fue interesante comenzar en un lugar totalmente extraño y desconocido que aúnque de niños siempre nos han mencionado ese lugar, es sorprendente s...