"ʙʟᴀᴄᴋ ᴄʜᴇʀʀʏ" → [ᴋᴏᴏᴋᴍɪɴ]

12

El alba dio su grata bienvenida cuando el sol entró por la ventana hasta  llegar al cuerpo de JungKook, quien frunciendo el ceño por la clara molestia, elevó un brazo hasta cubrirse, rápidamente recordando que aquella mañana alguien le acompañaba.

Poco a poco fue sentándose en el propio colchón, tallando sus ojos con un puño para después bostezar. Honestamente sus piernas dolían por las incómodas posiciones dadas la noche completa, eso sin contar su cadera de tanto haberla movido.

—SeokJin —volteó sobre sus hombros, moviendo el cuerpo envuelto en las sabanas —Creo que mamá se enojará… a ver si  no te corren —soltó aquello junto con una risita, provocando que Jin se removiera incómodo en su lugar, finalmente sentándose en su mismo lugar.

—S-señor Jeon… —bostezó cansado, formando una mueca de dolor cuando su espada martilló, inevitablemente enviando una mano a su parte baja —, mierda…

—¿Quieres una pastilla? —preguntó, a lo que alfa negó con la cabeza —. Por cierto, ¿a qué venías anoche? No creo que precisamente a follar, ¿o sí?

—Señor Jeon, pare…

—Eso no me decías anoche —le recordó con una risa, sacando un cigarrillo de su buró para enviarlo a su boca, buscando el encendedor.

Jin sólo sonrió amargamente, negando con la cabeza.

—Venía a decirle que pude descubrir una pequeña cosa más de JiMin…

Su estómago se revolvió, incluso tragándose el humo del cigarro cuando dio la primera calada. Seokjin tuvo que darle pequeñas palmaditas en su espalda, tratando de ayudarle.

—¿Está bien?

—Sí… —tosió nuevamente, finalmente recuperando el aire —, adelante, sigue.

—Me han informado de algo que si debo ser honesto, me sorprendió —dijo el alfa, enrollando las sabanas a su torso, mirando al suelo a la vez que achicaba los ojos —¿Recuerda al alfa líder que mueve la hierba y cocaína en Japón?

—¿Cómo olvidarlo? —dio otra calada a su cigarrillo, plantando una amarga sonrisa —Tus padres y los de ellos eran bastantes cercanos, ¿no es así? Mamá me platicó que ustedes fueron amigos.

—Exactamente, fuimos —recalcó la última palabra, dejándose caer en la cabecera de la cama, tragando saliva —. Él se fue a vivir a Tokio y yo me quedé en Corea, él armó su gran mobiliario de droga y ahora es muy conocido en el país. Pues me comentan que es muy amigo de JiMin, de hecho, Namjoon lo tiene personalmente para arreglar cuentas pendientes. Ese alfa enmascarado puede ser muy peligroso si nos basamos en que trabaja para Namjoon.

—Ese alfa... —JungKook murmuró incrédulo, creyendo que probablemente JiMin y Namjoon tendrían algo que ver —¿Y no sabes por qué el chico se encuentra aquí?

—Si me voy a lo lógico, creo yo que JiMin ha venido a un ajuste de cuentas. Probablemente que Namjoon le mandó a cobrar.

—Puede ser…. —asintió JungKook, dándole la última calada a su cigarrillo para continuar —Gracias por informarme.

—De nada —sonrió de lado, finalmente saliendo de la cama con las sábanas enredadas a su cuerpo, adentrándose al baño.

JungKook sólo tiró la colilla sobre su buró, dejándose caer en la cama a la vez que miraba el techo. Comenzaba a darse una idea de Namjoon con JiMin. Debía existir gente que supiera el secreto de JiMin, una persona mínimamente, la cual pensaba que se trataba de Namjoon, su probable pareja.

Ante aquello frunció el ceño, negando con la cabeza con deseo de borrar esa idea de su mente. Debía alistarse para hablar con TaeHyung, y sobre todo, hablar con personas para el ataque a SIwon.