CAPITULO 26

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SENSACIONES





•|NARRADOR|•



- Listo... - 

Al escuchar las palabras de alastor rápidamente poso una de sus manos en su herida ya tratada y vendada. Estaba sumamente molesta con ella misma, si tan solo unas simples palabras no la hubieran distraído o afectado tanto no estaría herida. 

- Muchas gracias, Alastor... - Murmuro sutilmente _____ 

No entendía como el demonio tuvo la paciencia para cuidarla y curarla, siempre pensó que era alguien de poca paciencia pero ahora demostró lo contrario, Claro... no se la hizo nada fácil a alastor, era demasiado dramática ante cualquier dolor, era por eso que nunca le permitió a nadie cuidarla.

Le dio una dulce sonrisa al demonio, le tuvo demasiada paciencia y mucho cuidado hacia su persona.. si ella hubiera sido alastor ya se había marchado, no cuidaría a alguien que segun ella no lo merecía. 

Pero sabia que alastor la quería, era por eso que la cuidaba, era por eso que el estaba ahi.. agachado por dos horas por culpa de su estupidez y dramatismo, de alguna forma necesitaba devolverle el favor por cuidarla y no solamente eso... todavía le debía una disculpa por apartarlo.

Tal vez si se hubiera quedado con el y no se hubiera ido nada le hubiera pasado, incluso quizás estaría de una forma comprometedora con alastor... pero claro... siempre tenia que arruinar todo con sus decisiones, lo arruino en vida y ahora lo esta arruinando en la muerte.

¿Cuántos errores había ya cometido?...

Estaba cansada, se sentía ahogada, no pudo proteger a las personas que amaba en vida y ahora en muerte las busca con desesperación pero a cambio de encontrarlas estaba dándole la espalda a personas tan dulces como los que habitaban en ese hotel.

Claro.. no eran tan amables pero.. ¿Quien en el mundo lo es?... uno no es asi por nacimiento o por que viene de la madre o del padre.. no, claro que no.. la vida te apuñala y te golpea tan fuerte que tienes que tomar medidas necesarias para vivir. 

Medidas que ella tomo y ahora estaba pagando por sus decisiones en el infierno, sus ojos se volvieron a llenar de lagrimas.. sus manos se dirigieron a su rostro y lo cubrieron por completo, un sollozo se escapo.

- Lo siento... -  Susurro tan débilmente.

Alastor no entendía por que se disculpa pero al escuchar el sollozar de la mujer solo pudo abrazarla tan fuertemente, claro que teniendo cuidado con su herida.

Había algo que _____ odiaba mas que nada.. y eso era que las personas la escucharan llorar, nunca le gusto la idea de que la consideran débil, claro que no, la vida fue tan cruel con ella que incluso mostrar una cara larga era signo de debilidad...

Pero eso no evito que al sentir los brazos de alastor rodear su cuerpo sollozara mas y mas, no entendía por que en los brazos de aquel demonio se sentía tan vulnerable, como si por primera vez pudiera desahogar todo el dolor que tenia dentro de su corazon.. algo que jamás hizo con su familia o incluso con su mejor amigo.

- No sabes cuanto me arrepiento de haberte alejado... lo siento tanto a-Alastor.. - 

Aunque intento no titubear mientras hablaba entre lagrimas no pudo evitarlo al nombrar el nombre del demonio quien sintió como en sus brazos la protegía, ¿De que?... quizás de ella misma o quizás algo que la intentaba lastimar. 

Dulce Luz,Dulce oscuridad...Y.. ¿Porcelana? [ Alastor Y Tu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora