PILOTO

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Diciembre 2019

--¡Camina más rápido Génesis!

Claro, me piden que camine más rápido cuando llevo millones de bolsos sobre mí y extremadamente pesados.

--¿Porque mejor no me ayudas?

Luna miro hacia atrás y noto mí dificultad. Se acercó a mí para tomar algunos bolsos en sus brazos y seguir el camino hacia la playa.

--Que lugar paradisíaco...

--Lo es-- Sonreí.

Era nuestra primera vez en Puerto Rico, habíamos ahorrado muchísimo tiempo para darnos nuestras merecidas vacaciones.

Trabajamos como fotógrafas de algunas marcas de ropa y agencia de modelos.

Una vez que llegamos a la playa dejamos todas nuestras cosas en la arena. Había personas, sobre todo gente en yates o dentro del agua.

El sol picaba en la piel, nos pusimos mucho protector y al fin, recién llegadas de Argentina nos tumbamos en las reposeras para tomar sol.

--¿Sabes? Estuve pensando en hacerme un tatuaje.

--¿Si? ¿Donde?-- Pregunto mí amiga.

--Mmmh, en la nalga-- Reí.

--Wow, se te vería increíble.

Dije nalga por decir pero no sería una mala idea.

--¿Dices que quedará bien?

--Increible, sos una bomba-- Guiña su ojo.

--Ya, deja de mentir.

--Yo nunca miento mí reina y lo sabes.

Y era cierto, Luna es la persona más sincera que conozco.

Después de pasar la tarde tomando sol, algunos mates y charlando sobre la vida era momento de sacar fotos.

Siempre la cámara va con nosotras a todos lados.

El atardecer era una pintura... de lo más bello que vi en Puerto Rico hasta ahora.

Luego de las fotos volvimos al hotel para bañarnos y salir a pasear al centro.

Que hermoso era el caribe, había viento pero no hacía nada de frío y eso nos permitía pasear.

Fuimos a un bar que daba a la costa caribeña y podría decirse que nos pasamos de tragos... Bueno, estábamos borrachas.

Lo peor de todo es que salimos a la calle borrachas sin darnos cuenta que estábamos haciendo el ridículo.

Probablemente mañana nos arrepentimos pero hoy se goza.

La peatonal estaba lleno de locales y vendedores ambulantes.

--Nenas, las invito a nuestro local para tatuarse ahora mismo si así lo desean.

Una chica pelinegra nos entrega un folleto.

Luna me lo arranca de la mano prácticamente.

--Ey-- La regaño.

--Vas a tatuarte ahora mismo.

La morocha me tomo del brazo y me arrastró hasta el local.

--¿Estás loca?-- Pude soltarme de su agarre al llegar a la puerta.

--Vamos, te quedará genial-- Chilla emocionada-- ¿Confías en mí?

--Si per--

--Listo, no hay excusa-- Interrumpio.

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