Abrí mis ojos cuando el ruido de mi celular interrumpió mi sueño.
Estiré mi mano y como pude atendí.
--¿Hola?
--Genesis-- Quien hablaba del otro lado era Luna-- ¿Dónde estás?
--En mi habitación-- Mi voz era más ronca de lo normal.
--¿Victoria?
Ya veo por dónde viene la pregunta.
--Durmiendo-- Dije rápidamente.
Me di vuelta para asegurarme que este dormida y si, estaba boca abajo dándome la espalda.
--Mmmmh ¿Larga noche cierto?
--Luna ¿Que quieres?-- Corte por completo la pregunta que me hizo.
Entre nosotras no paso nada.
Anoche me contó sobre su ruptura con Azul. Por lo poco que pudimos hablar fue sobre lo difícil que era mantener una relación a distancia ya que su ex vivía en puerto rico y Victoria se movía por muchas partes del mundo debido a su gira. Aunque lo más interesante fue saber que me odiaba y que su relación terminó porque Azul confesó muchas infidelidades mientras Victoria viajaba.
No entiendo como pueden romperle el corazón a esta mujer.
No pudimos entrar en detalle porque yo me moría de sueño y la verdad no quería saber tanto sobre ese tema.
Sobre todo porque no quería ilusionarme.
Y si, sigo loca por Victoria.
Por eso la evito, por eso quiero estar lejos porque siento lo mismo por ella independientemente de lo que pasó.
Intento evitar mis sentimientos pero no puedo.
Esa es la realidad.
--¿Génesis? ¿Hola?
La voz de Luna me saco de mis pensamientos.
--Lo siento, estaba pensando en algo-- Rei nerviosa.
--Ven a desayunar, tenemos que ir a la prueba de sonido-- Explico.
Yo asentí y corte la llamada.
Me di vuelta para observar a Victoria, seguía en la misma posición.
Tomé su hombro y lo sacudí levemente.
--Vicky-- Susurré.
Era la primera vez que la llamaba así, después de tanto tiempo...
Ella se removió incómoda y siguió durmiendo.
--Vicky, tenemos que irnos.
Volví a sacudirla y ahí si abrió sus ojos lentamente.
Su mirada azulada se conecto con la mía, nuestras respiraciones se mezclaban y el silencio invadía cada parte de la habitación.
--Hola-- Sonríe.
La voz ronca de Victoria le vuela el panty a cualquiera.
--Buen día-- Me senté en la cama dándole la espalda-- Debemos desayunar e ir a la prueba de sonido.
La rubia asintió.
Ambas nos cambiamos y bajamos a desayunar juntos al equipo.
Se imaginan la cantidad de bromas y cargadas que surgían en la mente de Luna y Mariana.
Una vez que desayunamos fuimos al teatro para pasar la prueba de sonido.
Probé mi cámara, ajustamos las luces y todo estaba listo para esta noche.