Veinticuatro

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Sin embargo, no quiero que te conformes con algo pequeño y de poco costo, con algo común que hacemos casi todo el tiempo Yeonho presiona las manos de Kangmin entre sus manos, mirando cariñosamente al menor Te prometo que me esforzaré para darte la mejor cita de nuestras vidas y será tan inolvidable para ambos. Voy a hacerlo, pero te pido, por favor, que seas paciente y entiendas que en estos momentos el clima no es ideal para salir incluso a dar un paseo, ¿Puedes esperar un poco más?


Kangmin presiona sus manos en puño y deja de hacerlo, para mirar a Yeonho fijamente.


Sí. Entiendo. Voy a esperar, pero también quiero que prometas que no me ignorarás de esa forma. Si estás pensando en algo, si te preocupa algo, quiero saberlo, aún más si es sobre nuestra cita, porque no quiero que cargues solo con tantas preocupaciones. Yo también puedo ayudar se acerca a Yeonho Quiero ayudar. No quiero dejarle solo con todo.


Yeonho sonríe y acaricia suavemente los cabellos de Kangmin.

Gracias por preocuparte, pero estoy bien. Te pediré ayuda, si lo necesito. Por ahora, no te preocupes por nada.


Kangmin asiente y mira con curiosidad la sala a espaldas de Yeonho. Quería quedarse y conocer la casa, pero Yeonho ofrece llevarle de regreso a su casa antes de que sea demasiado tarde para salir.


Kangmin acepta conforme con ello, sonriendo y caminando con mucha alegría hasta la parada de autobuses.


Ambos esperan. Kangmin desborda de alegría hablando de lo que quiere para la cita, mientras Yeonho escucha y le mira con adoración, peinando cuidadosamente el cabello húmedo de Kangmin con sus dedos.


Durante el camino a casa de los padres de Kangmin, este continúa hablando mientras Yeonho continúa mirándolo con adoración.


¿Por qué me mira de esa forma? Kangmin preguntó después de levantar la cabeza y encontrarse nuevamente con la risueña mirada de Yeonho.


No puedo evitarlo Yeonho susurró, presionando la punta de la nariz de Kangmin con los dedos Eres muy lindo.


Kangmin inclina su cabeza hacia atrás casi de inmediato, sintiendo un creciente revoloteo en su estómago por la repentina acción del mayor.


Los ojos de Kangmin viajan nerviosos de un lado a otro, avergonzado por las palabras de Yeonho y evitando sonrojarse demasiado por la presencia de otras personas en el autobús.


Yeonho miraba constantemente con cariño a Kangmin y este se sonrojaba. Yeonho hablaba suavemente para Kangmin y este tartamudea con timidez. Yeonho sostiene la cálida mano de Kangmin y este se retuerce con vergüenza. Yeonho se ríe de Kangmin, por dicha reacción, y este se sonroja aún más, pero su alegría no se esfuma incluso al llegar a casa y despedirse de Yeonho con un beso en la mejilla.


Yeonho también siente mariposas en el estómago cuando Kangmin besó su mejilla y saluda alegremente con la mano antes de entrar a casa, pero Yeonho logra contener sus movimientos y su vergüenza se manifiesta en el sonrojo de sus mejillas.


Definitivamente, Yongseung podía ver y confirmar que había algo más entre ellos que le molestaba demasiado.






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Los días avanzaron con normalidad. Yeonho y Kangmin se reunían de vez en cuando en la cafetería, comían, conversaban y regresaban juntos a clases. Todo marchaba bastante bien.


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