530. Epílogo 2 - No se Encuentra en Ninguna Parte (6)

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Una vez más, una hora antes del apocalipsis.

-... Mierda, ¿dónde diablos estoy?

Han Sooyeong sostuvo su cabeza mareada y rápidamente examinó sus alrededores.

Lo último que vio fue la figura de Yoo Jonghyeok desapareciendo bajo la lluvia de luz. Rápidamente echó un vistazo a su propio cuerpo.

Fue un éxito.

Sus brazos mucho más delgados y músculos que perdieron su flexibilidad.

No podía sentir ninguna de las historias que había compilado, las habilidades en las que se entrenó, ni siquiera su estigma.

Sin embargo, eso no fue un problema. Ya habían pensado qué hacer con tales problemas, cuando el escenario se puso en marcha nuevamente. No, el verdadero problema era...

-Mierda, no me queda mucho tiempo.

La batería de su teléfono estaba casi agotada, y no podía confirmar el bienestar de sus compañeros en este momento. Fue una fortuna entre las desgracias que de alguna manera logró descargar las ubicaciones de sus compañeros del chat grupal en este momento.

-... Estos chicos, lo hicieron bastante bien sin mí.

Solo una exploración casual fue suficiente para que ella pudiera saber dónde estaban actualmente con su operación. Sin embargo, eso no fue demasiado sorprendente, teniendo en cuenta que ella era la encargada de la operación en primer lugar.

Pero entonces, los ojos de Han Sooyeong escaneando el mapa de los lugares desplegados comenzaron a temblar.

-Este idiota...

Ella levantó la cabeza y miró a su alrededor.

Aunque podría ser apretado, parecía que todavía quedaba suficiente tiempo.

***

30 minutos antes del apocalipsis

Los ojos de Lee Jihye que miraban aturdidos el reloj fueron repentinamente bloqueados por una cabeza llena de cabello negro.

-Oye, llorona. ¿Planeas quedarte para las clases nocturnas hoy?

-N-no. Uh... Eh.

Ya habían pasado veintiocho días desde la regresión, pero aún no se había acostumbrado a ese apodo.

'Llorona'.

¿Cuándo fue la última vez que escuchó a alguien llamarla así?

Alguna vez, ella tenía otros apodos como ese. Y ella realmente había regresado a ese momento.

-¿De verdad? Solo preguntaba, pero ¿por qué tan repentinamente?

Los ojos de la otra chica se arquearon como si estuviera sonriendo.

Por cada día durante los últimos cuatro años, Lee Jihye nunca había olvidado esos ojos. Pertenecían a una chica de piel pálida algo más pequeña que ella. A la blusa de su uniforme escolar le faltaba un botón. Su etiqueta de nombre desgastada, donde todavía se podía encontrar su nombre.

Cuando ella abra los ojos, los iris inyectados en sangre la mirarán fijamente.

La temblorosa mano derecha de Lee Jihye se aferraba a la pierna del pantalón de su uniforme de gimnasia.

-Jihye-ya, todo estará bien.

Lee Jihye agarró desesperadamente su mano temblorosa.

Espada Rompecielos ||| orvDonde viven las historias. Descúbrelo ahora