Between Us (entre nosotras) // KiVi (Violeta y Chiara)

XXXV

(Pov Chiara)

Me desperté en la cama de violeta, ella estaba a mi lado tumbada. Quise estirarme pero un dolor punzante recorrió todo mi cuerpo y me hizo emitir un grito ahogado.
Me arrastre hasta el baño como pude quejándome por mis dolencias, y cuando mi figura se alzo delante del espejo pude presenciar el horror.
Con la cara totalmente magullada, mi labio superior hinchado, mi nariz amoratada y las ojeras completamente negras; mis ojos inyectados en sangre mermaban el color verde que solía predominar.

Palpe con mis dedos esas marcas, dolían.
Levante la camiseta que llevaba dejando al descubierto un golpe mucho mas grande marcado en mis costillas.

Me lave los dientes, volví a la habitación y me vestí con la misma ropa que llevaba del día anterior; podía haber cogido algo de ropa limpia de Violeta o incluso mía, pues en el armario de la pelirroja ya había algunas de mis prendas, pero lo preferí así, vaquero negro, las Martens y la chupa.
Me tome la libertad de cogerle unas gafas de sol a Vivi, con la intención de cubrir mi cara lo máximo posible.

Escribí una nota para la pelirroja que deje sobre el tocador, me acerque a darle un beso en la cabeza y me marche.
Los problemas había que abordarlos de frente.

••••••

(Pov Violeta)

Cuando abrí los ojos ya era bastante de día, me había costado muchísimo conciliar el sueño la noche pasada, así que había estado dandole vueltas a la cabeza hasta las 5 de la mañana aproximadamente.
Me desperece en la cama buscando el calor de Chiara a mi lado, pero ya no estaba.
Al principio no le di importancia, pues supuse que estaría en el salón o la cocina; pero al recordar la noche de ayer y el estado en el que llego a mi casa empece a preocuparme.
¿Y si había accedido al chantaje de su familia?

Ante ese pensamiento me levante de un salto de la cama para buscarla por la casa, pero ella no estaba, me asome por la ventana para ver si su moto seguí aparcada donde siempre y tampoco.
Empece a hiper ventilar, no quería pensar que fuese tan descerebrada como para hacer lo que creía que iba a hacer.

No sabia que hacer, no sabia donde ir ni donde podía estar. Solo podía desear que no le pasase nada.

Fue entonces cuando vi una nota sobre el tocador. La sujete entre mis manos y empece a leer.

Buenos días mi reina
Espero que hayas podido descansar al menos un poco, siento mucho lo de ayer; no era mi intención asustarte ni que tuvieras miedo, pero creo que merecías saber, al fin, una parte de la historia de mi vida.
Se que es difícil de asimilar y que seguramente tengas miedo, pero tranquila, no permitiré que nadie te haga daño mientras yo siga viva.

Hice una pausa en la lectura ante esas palabras, podía parecer una frase típica, hipotética; eso de "tendrían que pasar por encima de mi cadaver.." pero es que nunca se había predispuesto con esa intensidad la posibilidad de que eso sucediera realmente.

Trague saliva y seguí leyendo

Tengo que enfrentar este problema antes de que nos lleve a todos por delante.
Prefiero no decirte donde voy para evitar que puedas hacer alguna locura. Confía en mi Vivi, todo va a estar bien.
Te quiero con todo mi corazón.
Chiara 🤍

Empece a llorar desconsoladamente, se que decía que no debía hacer nada, pero no podía quedarme parada esperando tener noticias de ella, y menos después de que me hubiese "dicho" que me quiere.
Empece a manejar mis hilos hasta que conseguí el contacto de Ruslana. Le llame sin demorarme un segundo.