Between Us (entre nosotras) // KiVi (Violeta y Chiara)

XXVI

Habían pasado unas dos semanas desde que compraron los vuelos, fue algo precipitado pero consiguieron una buena oferta para viajar desde el lunes al domingo.

Violeta le había pedido ayuda para hacer su maleta y allí se había plantado ella, para brindársela a su amada.

Kiki abrió de par en par las puertas del armario de Violeta, y le sorprendió gratamente el orden y limpieza que mantenía la pelirroja.

-bueno, pero si esto parece un museo-

-tampoco es para tanto, es que me gusta tenerlo todo a la vista-

-me tendrías que dar algunos tips para conseguir esto-

-¿eres un desastre con tu armario?-

-nooo, ósea bueno, a ver, depende del momento, si y no, mas si que no pero bueno jeje- sonrió inocente

-ósea que quieres que te ayude a ordenar tu armario-

-porfa, algún día. Es que se me da fatal de verdad- la morena puso ojitos de pena
Violeta rio sonoramente y beso su mejilla

-pues algún día cuando volvamos te ayudo- sonrío- y ahora venga, que tal de tiempo hace allí?-

-pues mucho aire, muchísimo, y humedad. Y siendo diciembre pues hará frio. Pero llévate un bikini por si acaso- le dedico una mirada coqueta

Siguieron ensimismadas con la maleta y se les paso la tarde volando.

Al día siguiente salía su vuelo; Violeta le había pedido el favor a Denna de que les llevase hasta el aeropuerto en coche. La rubia acepto sin impedimento.

Las recogió en casa de violeta a las 8 de la mañana, pues entre lo que tardaban al aeropuerto y todo el tiempo necesario para el control les llevaría unas 4 horas.

Alex se había ofrecido a acompañarlas también para que Denna en el trayecto de vuelta no fuese sola.

Las chicas estaban emocionadas por poder pasar una semana entera juntas y solas, sin preocupación alguna, o eso al menos esperaba Chiara, ninguna sorpresa.

Cuando llegaron, se bajaron todos del coche para despedirse

-disfruta mucho puta, que envidia me das te lo juro- dijo la rubia mientras abrazaba a Violeta- y manda alguna foto anda- se sonrieron

-ayy mi Vivii, pasadlo super bien- se despidió el moreno

-y vosotros- la morada les guiño un ojo

-bueno, nosotros no vamos a tener la oportunidad de follar con el mar de fondo pero se hará lo que se pueda- ese comentario le costo a la rubia un manotazo pelirrojo

-que bruta eres- dijo bufando Violeta

-AH Y TU! Cuídamela eh, que te lapido- dijo en dirección a Chiara

-a sus ordenes- le respondió con un saludo militar.

Violeta y Chiara cogieron sus maletas y se adentraron en el edificio de la terminal.

•••••

Al aterrizar en la isla, pararon un taxi que les llevaría hacia la masía.

Avanzaban por aquel paisaje, de tonos verdes, bañados por la humedad del mar. A lo lejos se comenzó a vislumbrar la entrada a la finca y la casa, toda de piedra, parecía tener unos dos pisos. Una construcción clásica pero de gran amplitud.

Se bajaron del taxi recogiendo sus pertenencias y subiendo la ladera arrastrando sus maletas.

Se respiraba un aire tan tranquilo, el lugar transmitia un aura preciosa, de aquellos sitios en los que te podrías perder infinidad de tiempo solo admirando el paisaje y disfrutando del arrullar del mar.