[pausada y en corrección] TROLLHUNTERS: un nuevo tiempo.

CAPÍTULO 14: Inconvenientes.

Toby

Toby podía oír su respiración agitada mientras el malvado troll se acercaba a grandes zancadas.

-Solo un golpe... -se dijo a si mismo-. Solo uno...

Bular se adelantó e intentó golpear al nuevo Cazatroles. El chico, por suerte (y conveniencia del guión :v), logró esquivarlo. Entre golpe y golpe, la tensión de Toby iba creciendo. La adrenalina corría por todo su cuerpo

En un momento dado, y con un golpe seco y veloz, el troll perdió uno de sus dedos.

Bular retrocedió dos pasos, gruñendo.

-¡MALDITO NIÑO HUMANO! -rugió mientras tomaba su muñeca.

Toby se pasó el dorso de la mano por debajo de la nariz y retrocedió a una distancia prudente.

-¡Y hay más de dónde salió eso! -respondió muy confiado.

Bular, que había estado mirando su piedrosa mano, alzó la vista y la posó justo en los ojos del Cazatroles, haciendo contacto visual por un momento.

Dando grandes saltos, el troll comenzó a correr hacia Tobías. Ante tal gesto, Toby comenzó a hacer lo mismo, saliendo de la sombra que el rocoso puente emabana.

Al llegar al límite de la sombra, Bular se detuvo en seco, jadeando.

-¡Puedes huir hoy, cazatroles! -exclamó sin salir de la sombra-. Pero en algún momento; no sé dónde, no se cuando. ¡TE MATARÉ!

Respirando con dificultad, el chico salió de los canales a toda prisa y sin mirar atrás, oyendo los rugidos estruendosos del furioso troll.

***
Blinkie

Se veía rodeado por muchos trolls, que le apuntaban con sus lanzas.

Pensando a toda velocidad, metió dos de sus manos en los bolsillos y sacó algunas Rocadwärks.

-¡Atrás! -exclamó alzándolas en el aire y agitándolas- ¡O todo este lugar volará en pedazos!

Los troles retrocedieron algunos pasos.

Gatto soltó un gruñido.

-Déjenlo irse... -murmuró. La perspectiva de ser volado en mil pedazos no le agradaba.

Blinkie comenzó a retroceder lentamente, sin quitar su mirada de Gatto. Agarró una roca cualquiera y lanzó las explosivas a la lava. Después, salió corriendo hacia la estación de giro.

***
Clara

Se encontraba detrás del mismo monumento, pensando en la infinidad de posiblilidades que había. Habían pasado menos de cinco minutos desde la llamada cuando una mano se posó sobre su hombro.

Sin dudarlo, la joven se volteó y asestó un puñetazo en toda la cara de la persona que lo hubiera hecho. Después, se tapó la boca con ambas manos.

Jim estaba detrás de ella, agarrándose la cara por el golpe.

-Tienes una derecha fuerte... -murmuró con voz nasal mientras se agarraba la cara.

Clara sonrió con culpa.

-Lo siento -dijo- ¿Estás bien?

-Sí... -murmuró el joven-, no te preocupes...

Clara cambió su actitud en un segundo.

-¿Que rayos estás haciendo aquí? -le espetó- ¡Tienes que descansar! -exclamó, molesta.