𝐅𝐨𝐫𝐛𝐢𝐝𝐝𝐞𝐧 || Riverduccion

018

—Félix. Por amor a Dios. Pon atención a esto, ya van a acabar tus "vacaciones" y tienes que enfocarte en el trabajo, no en los senos de Samantha.

—Tengo todo el derecho del mundo de follar, veo que a ti te quitaron el tuyo. Respondí, me encogí de hombros y le di una palmada en la espalda.

—Idiota. Si supieras a todas las que me e tirado en dos meses te arrepentirás de tener novia.

—No responderé a tu comentario. Dije convencido, muy seguramente le hubiera dicho que Sam tenía el mejor coño que mi polla haya follado y que si el fuera yo también estaría con ella.

Mejor me reservaría mis comentarios ante el glorioso coño de mi linda novia.

—Sabes que es cierto—reí divertido como si hubiera hecho el mejor chiste del mundo, negué con la cabeza.

—No te diré nada, habla ahora o me voy. Ronaldo giró los ojos y sacó un par de papeles de un libro erótico.

"TG" El actual libro favorito de Samantha, lo sabía porque hablaba de lo mucho que quería que la follara de la manera en la que estaba escrita, tendría que estudiar las malditas hojas con letras y diálogos con un buen olor para poder enterrarme en ella. Jamás llegaría a los pies de Alex Volkov.

|Mi libro favorito|

Alcé las cejas sorprendido, aquellas hojas estaban claramente como un marca páginas casero, dejó una de ellas dentro y las extendió en el escritorio frente a ambos, impresiones de twits hablando sobre la relación que tenía con aquella.

—¿En qué momento te volviste fan de la lectura?

—No te incumbe. Cállate y déjame leerte estas mierdas.

—"Samantha Rivera actual novia de Félix Deangeli toma una foto en hotel con varias cajas de pastillas anticonceptivas."

—"Félix Deangeli sube una foto con su novia y una tira de condones nuevos está tirada detrás de ellos."

—¡Haz el puto esfuerzo de esconderlos cabrón! ¡Me alegro de que se cuiden, se que todo se iría a la mierda si en nueve meses de ese coño sale un bebé pero no lo expongan!

—¿¡Crees que lo hacemos adrede!? Jamás subimos fotos juntos por tu puta culpa. ¡Culpa mía no es si la gente se da cuenta de lo bien que la paso en la cama! Giró los ojos—Aparte, es un buen ejemplo para los demás, cuidarse y no embarazar o embarazarse de jóvenes.

—Tienes treinta. Aclaro irónico—No eres tan joven—reí sarcástico—¿Sabes cuántos años tiene ella acaso? Veinte, tiene todo el derecho de vivir su vida como quiere y si es conmigo mejor.

—No me jodas mucho. Agregué—Arruinas nuestra reputación con los diez años que le sacas, ¿Te das cuenta de que podrías ser su padre?—Ella eligió que polla quería y eligió la mía. Me compadecería de ella si hubiera elegido la tuya.

—Ja-Ja que gracioso.

—Gracias. Respondí con calma, giró los ojos y atrapó su entrecejo con los dedos, muy seguramente estaba mucho más preocupado por los condones que por las guerras.

—Lárgate, necesito pensar que voy a hacer. Me encogí de hombros y caminé hacia la puerta para salir de la oficina—Sam, nos vamos, muero de sueño. Dije, ella asintió y se levantó del sillón donde aparentemente forcejeaba con Ethan, fruncí el ceño extrañado—No me quería dar mis cigarros. Aclaro, reí divertido y cuando Sam se acercó a mí con una sonrisa boba y la mirada brillante la envolví en mis brazos y besé sus frente, bajé mis labios por el puente recto de su nariz y llegué a sus labios.