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- Llevo un tiempo dándole vueltas a una cosa que...me da un poco de vergüenza decirte, es un poco raro. - Juanjo se reía entre palabras con una sonrisa nerviosa constante. Cuando terminó su frase poco directa hubo un silencio entre ambos dónde ninguno sabía que decir por los nervios. - Di algo! - Martin se rió con timidez y pensó algunos segundos antes de responder.

- Yo tambien llevo tiempo pensando... - Se mantenían de la mano mientras se miraban con esa sonrisa de enamorados y el brillo en sus ojos.
Aunque todos sus compañeros y la profesora miraban atentos a la conversación, ellos se sentían en una nube, habían olvidado que había gente al rededor, sólo podían mirarse el uno al otro, nadie más importaba, o al menos a ellos no les interesaba.

No cambiarían a la persona que tenían delante por nada ni nadie.

- Te amo. - Soltó Juanjo de repente, sorprendiendo bastante a Martin, aunque no lo demostró demasiado, pero en el fondo sentía que su corazón escaparía de su cuerpo, sentía un calor por dentro, que quizás en cualquier segundo se derritiria, le daban ganas de gritar lo que sea para liberar todo el amor acumulado en sí mismo.

- ¿Me amas? - Preguntó Martin riendo un poco, a lo que Juanjo asintió mientras sonreía y bajaba su mirada a los labios del de bigote, volviendo a subir a sus ojos y así constantemente.
- Yo también te amo, más que a un amigo. - Después de ese corto silencio donde Juanjo no había agregado nada, Martin volvió a hablar, soltando esa confesión que dejaba de ser parte de la actuación, aunque probablemente nada de lo anterior dicho había sido actuado.

Y era evidente, las miradas, las sonrisas, lo toqueteos, las risas, la conexión.
Era imposible fingir algo tan real, lo de ellos era demasiado especial, indudable, eran dos jóvenes enamorados que soltaban su amor por cada poro de su piel, era algo que no podían evitar, no lo lograban controlar ni siquiera en la interpretación, les salía solo, y era hermoso.

Querían lanzarse encima del otro, juntar sus cuerpos, si fuera posible, sus almas, ser una sola persona, querían sentirse, abrazarse, conectar sus cuerpos pues encajaban de forma perfecta.

Lo demostrarom en el abrazo que se dieron después de la conversación, parecía que estaban hecho el uno para el otro pues el rostro de martin encajaba perfecto en el espacio entre el cuello y hombro de Juanjo, tanto como los brazos de Juanjo se amoldaban perfectamente al estómago y caderas del chico.

Sentían una comodidad inexplicable cuando se tenían cerca.

El cuerpo de Martin se debilitaba, perdía todas sus fuerzas y no le importaba porque sabía que Juanjo lo sostendría, lo mantendría de pie, lo ayudaría en cualquier circunstancia, confiaba en él, le confiaba su persona, le regalaría todo de él, su cuerpo y sus sentimientos, porque estaba seguro de que le cuidaría.

El cuerpo de Juanjo se recomponía, sentía seguridad en él, sabía que sin importar lo que pase, recibiría el apoyo y la compañía de Martin, éso le hacía sentir estable, podía ser quién realmente era con él, con nadie más se reía como lo hacía a su lado, era verdaderamente Juanjo, sin ocultar sus miedos ni fingir orgullo, era él mismo.

Se separaron del abrazo y se miraron algunos segundos, no dijeron nada, pero al mismo tiempo con el contacto visual lo habían dicho todo, ellos habían entendido lo que había querido transmitir el otro, estaban felices, plenamente tranquilos y seguros de lo que tenían en ese momento. La compañía del otro.

La profesora los miraba con brillo en los ojos, parecía que ellos iluminaban esa sala, desprendían y transmitían muchísimo más de lo que se les había pedido, te cautivaban, cualquier persona que los tenga de frente, con esa paz, daría lo que fuera por no dejar de verlos jamás, era hipnotizante.

- Que bonito chicos. - Abril empezó a aplaudir, siendo seguida por todos los compañeros, mientras ella seguía mirandolos orgullosa con una sonrisa.

Ambos jóvenes se rieron nerviosos de todo lo que habían mostrado en público sin ser completamente conscientes.
Tomaron sus manos, y juntos fueron de vuelta a sus asientos.

Durante toda la clase seguían pasando dúos que actuaban situaciones cortas, y durante cada una de esas interpretación, Juanjo y Martin estuvieron constantemente dedicándose miraditas y tocando sus manos con suaves caricias y mucho disimulo.

Martin inclinó su cabeza, apoyándola en el hombro de Juanjo, aferrándose a su brazo y cerrando los ojos, sintiendo el aroma del chico con satisfacción estando muy a gusto.

Chiara y Paul se acercaron a los chicos mientras se tenían una sonrisa cómplice.

- ¿Actuamos bien, no? - Preguntó Juanjo riéndose cuando tuvo a sus dos amigos cerca.

- Sí, muy bien, parecía real. - Respondió Paul también en forma de burla.

Hasta ese punto ya no había nadie que no sepa lo que tenían ellos dos, causaban ternura en todos sus amigos y en general en cada persona que los veía con sus tontos coqueteos dónde era difícil cuestionar cuál de los dos estaba más nervioso.



Espero se haya entendido la referencia de la actuación JAKSJAJ

80 votos y actualizo mañana
(Quedan solo 2 caps!!)

MARTIN SE QUITÓ EL BIGOTE Y EL MULLET ?!?!

Ni Siquiera Amigos. | JUANTINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora