Cap 28

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— Hasta aquí la clase, me retiro.-El profesor cerró el libro que tenía en sus manos, estruendosamente dándome un leve sustito por andar de baboso mirando a un punto fijo.Para cuando el vejestorio salió, la campana sonó y todos mis aburridos, molestos y irritantes compañeros se dispararon hacía la salida.Yo en cambio, me quedé sentado en mi pupitre, con mi estómago pidiendo a gritos que comiera algo (un riquísimo sándwich de queso).

Obvio que había un problema.

Si salía y daba a conocer mi cara a la luz de los pasillos de mi instituto a la cafetería, claramente mis amigos estarían ahí, a los que CLARAMENTE no iba a poder evitar porque CLARAMENTE los he estado evitando todos estos días por los otros dos.

Y mierda, no quería tener un maldito momento incómodo.

No quería que mi corazón doliera poquito por Jungkook y Sunmi.

Pero en fin, ¿Saben qué?, que se joda Jungkook, que se joda Taehyung, yo soy el putisimo amo, y voy a ir a la cafetería a por mi sándwich con huevos como debería ser, no me iba a morir de hambre por eso.Es lo único que me queda.

Me paré con supuesto valor, y camine a paso supuestamente valiente a la cafetería con la cabeza en alto (tenía el gorro del abrigo tapándome, junto con mi cabello con intenciones de no ser notado).Y para cuando estuve enseguida divisé al grupo estrella en la misma mesa de siempre, solo que con una nueva integrante y faltante de mi presencia.

Los ignore cuidadoso, y fui a comprar mi sándwich, teniéndolo en mano, todo el valor que había reunido se fue de una al darme la vuelta y que Seokjin me hubiera llamado alegre.

Carajo

— ¡Hey, chicos!, ¿Qué tal están?.-Actúa con normalidad, vamos Jimin tu puedes.

— Jimin, ¿Tu falta de estatura te ha hecho perderte entre tanta gente o qué?.-Fueron las bonitas primeras palabras de Yoongi después de días sin hablarnos.Sonreí, y me senté al lado de Hoseok, fingiendo que no estaba evitando la mirada de dos ciertas personas que parecían querer soltar rayos lásers de lo profundas que eran.

— Que gracioso, Yoon, yo también te extrañé mucho.-Seok giró los ojos dándome un zape en la cabeza.

— ¿Dónde anduviste?, ¿Con quién?, ¿Por qué?, ¿Cuándo?, ¿Siquiera pensaste en lo preocupado que estaba?, no eres comediante, Park Jimin, te vuelves a perder así, y verás.-Su aura amenazadora hizo que me estremeciera de abajo a arriba.Asentí varias veces al ver como volvía a levantar el libro con el que antes me había pegado.Y es que claro, ellos no tenían la culpa de mis problemas de mierda, me merecía todos los jodidos golpes del maldito universo.

Porque sé perfectamente que si me ponía en los zapatos de todos, yo también querría que estuviera conmigo.

Me rendí, ya nada valía la pena pero en fin, hombres.

— ¡Woah!, ¿Así que tu eres el famoso Jimin, verdad?-Ella me sonrió de una manera tan angelical y bonita, que comprendí a Jungkook por un momento, no se merecía nada malo.

— Síp, en carne y hueso, guapa.-Le devolví la sonrisa de la misma manera, solo que yo parecía un ángel caído emo y ella una diosa primaveral.Miré a Jungkook con recelo.-Si la lastimas, Kook, yo seré quien personalmente te mande un grupo de mafiosos a golpearte.-Sentencié serio, y aunque Jungkook mostró leve sorpresa que quizás yo solo pude notar, sonrió mostrando esa hilera de dientes perfectos, esa sonrisa que tanto me costaba superar.

— Comprendido.

— ¿Por qué mafiosos?.-Preguntó fingiendo normalidad.-Mejor invoquemos al demonio y que le de una patada en las bolas.

Love you // KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora