Capítulo 19.

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" Secretos del viejo continente."

—  Joven Langford, es un gusto volver a verlo.

— ¿Dónde está, Christian?

— En el despacho, pero esta...

Sin escucharlo entre directamente al despacho, la escena era sumamente repugnante, tenía a una mujer sobre el escritorio semidesnuda y no estamos hablando de Priscila.

— ¿No sabes tocar?

— ¿Por qué lo haría? Igual es mi casa, así que saca a tu zorra que debo hablar contigo.

La mujer solo tomo su ropa y salió corriendo, Christian comenzó abotanarse la camisa y me miró molesto.

— ¿Qué quieres? — Tomó un respiro y se acomodo el cabello.

— ¿Priscila sabe de tus aventuras? — Sonreí y me senté.

— No lo sé, ¿Marcella sabe lo de Irina?  — Una sonrisa de lado a lado se dibujo en su rostro.

— ¿Qué trataste de abusar de ella o casi la matas? — Me puse serio.

— No engañas a nadie hermano, la pequeña pelirroja te vuelve dócil y como no puedes tenerla usas de consolación a Marcella.

— ¿Crees que Irina me interesa como mujer? — Negué con una sonrisa. — Ninguna mujer me doblega, Irina es un medio para un fin, pero no vine a hablar de ello, quiero saber ¿que putas pretendes al reunirte con gente de los Ivanóv?

— Negocios, Priscila consiguió hacer un acuerdo entre ambas organizaciones.

— ¿Acuerdo?
Debes bromear, esa gente es la culpable de la muerte de nuestra madre, eliminarlos es la clave.

— Tú mataste a la mujer del jefe y te culpan por la muerte de la hija, estamos tratando de salvar tu trasero, nuestro padre pretende entregarte.

— ¿Qué?

— Priscila dijo que papá te quiere muerto.

— Imposible, él no haría algo así.

— Damián no es un secreto que siempre haces lo que te place, tienes una larga lista de muertos.

— Toda esta mierda la ha metido esa zorra a tu cabeza, que decepción que seas tan débil.

Arrojé el folder sobre el escritorio.

— ¿Qué es esto?

— Sebastián murió.

— ¿Qué? — Christian se paralizó al escucharlo.

—  Un mes después del ataque contra ti e Irina, fueron por mí, lo arrojaron como a un animal, Sebastián sabía mucho. — Señale la página en el folder. — ¿Te resulta familiar este emblema?

— No es posible.

—  Priscila estuvo detrás de cada ataque y sabes que antes de que nuestro padre la sacará de ese burdel, ella mantenía contacto con Cipriano, Bárbara Ivanóv, Priscila fue quien me dió la información de dónde encontrarla, porque ella sabía de la relación que tuvieron Lorenzo y Bárbara en el pasado.

— ¿Y por qué haría algo así?

—  Traicionar a una mujer se paga caro, Priscila no pasaría por alto que Lorenzo la engañará, Bárbara fue su amante en el pasado, los celos de Priscila son despiadados, así que cuidado y se entere de tus aventuras, hermano. — Sonreí de lado a lado.

— ¿Y por qué ahora quiere salvarte? — Christian seguía confundido.

— Priscila me odia, no quiere ayudarme, trama algo para su beneficio y es lo que voy averiguar. —Me dí la vuelta para salir.

Peligrosa atracción.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora