El chico que odio

Capítulo 22

Elijah se acerca hacia mí sin darse cuenta de la tensión que está creando en el lugar. Con una gran sonrisa, se inclina y me besa en la mejilla. Sigo conmocionada.

— ¿Qué haces aquí, Elijah?

— Dejé mi trabajo por ti. Pensé que estarías feliz.

— No. Esto no puede ser posible. ¿No te enteraste de lo qué pasó entre nosotros? Te dije algo muy importante el día que me llamaste, ¿te acuerdas?

— ¿Qué me dijiste? Seguramente la llamada se cortó porque no me acuerdo de nada. O al menos no escuché nada de lo que me debería preocupar.

— Oh, no. Debes de estar bromeando. —Hayden se detiene en cuanto nos ve juntos. Tensa todo su cuerpo mientras sacude su cabeza decepcionado y se va del lugar sin voltearme a ver. El resto de las personas, nos observan en silencio.

— Natalie, ¿qué está pasando? —Elijah pregunta desconcertado.

— ¿Podemos hablar en privado?

Me dirijo hacia la entrada del vestíbulo y me siento en una silla esperando a Elijah. Tomo sus manos entre las mías y cierro los ojos tratando de recordar al Elijah de doce años.

— Elijah...

Antes de que pueda proseguir, Elijah se pone de rodillas frente a mi, aún agarrando mis manos.

— ¿Qué pasa, Natalie?

— Elijah... Terminé contigo hace tres días.

— ¿Qué? No lo entiendo, Nat.

— Cuando me llamaste para decirme que tenías que viajar por tu trabajo y no podrías llegar a tiempo para la boda, te dije que lo nuestro se terminó... Seguramente me quedé sin señal en el hotel y no me escuchaste.

— ¿Es por mi trabajo? ¿Fue por eso?

— Si... Siempre ponías tu carrera primero y me alegro de que seas una persona exitosa pero nunca apoyaste mi trabajo... Y en este viaje me di cuenta que no soy tu prioridad y quiero ser la primera opción de alguien.

— Todo el esfuerzo que pusé en mi trabajo fue para nosotros. Para ti, Natalie.

— Aún así, no estaba feliz contigo. Desde que salimos de la prepa, los dos cambiamos. Queríamos cosas diferentes en la vida y teníamos diferentes metas. Somos completamente diferentes, Elijah. Terminamos.

— Pero estoy aquí para ti porque te amo y sé que la boda es demasiado importante para ti. Solo dame otra oportunidad... No me dejes. —Elijah agacha la cabeza. Me aparto de sus manos y me aparto de él.— ¿Qué pasa? ¿Ni siquiera quieres volver a intentarlo? Dime una cosa... Hay alguien más, ¿no es así?

— No te puedo mentir... Así que te diré la verdad... Si. Hay alguien más.

— Realmente no podías esperar para deshacerte de mí, ¿verdad? —Elijah me mira incrédulo.

— No es así. Te dije que habíamos terminado por culpa de tu trabajo. Pensé que me habías escuchado.

Elijah se levanta enojado.— Pues no. No fue así. Vine a Vermont para estar contigo. No lo puedo creer. Desperdicié una enorme oportunidad que seguramente no se va a volver a repetir. Tienes toda la razón. Hemos terminado.

— Elijah, no te quería lastimar. Eres mi mejor amigo...

— No quiero hablar contigo. Regresaré a Los Ángeles. Dile a Carina que le mando un saludo.

Sin más, Elijah se va del vestíbulo caminando rápido entre la multitud.

Regreso al hotel y toco la puerta del cuarto de Carina. He tratado de llamar a Hayden y le he dejado varios mensajes, pero no me ha respondido... Sé que me está evadiendo... Después de haberme visto con Elijah, no lo culpo. La puerta se abre de golpe.

— Cari... ¿Estás bien? ¿Podemos hablar? Espero que podamos resolver las cosas entre nosotras. Lo siento por todo lo que pasó.

— Mi padre no vendrá... Hayden me llevará al altar.

— Hablando de él... Fui a su cuarto, pero no estaba. He intentado llamarlo.

— ¿Por qué no me dijiste?

— Lo siento Carina. Debí haber hablado contigo desde que llegué, pero era tu boda y no quería estropearlo.

— ¡Eso es una estupidez!

— Tienes razón... No te lo dije porque tenía miedo.

— ¿Crees que no puedo manejar mis sentimientos? Soy una persona grande, Natalie.

— De todos modos no quería compartir lo de Hayden con nadie. Ni siquiera contigo porque si lo hacía, eso significaría que mis sentimientos hacia él son reales.

— ¿Lo amas, Nat?

— Sí. Lo amo. Lo amo mucho.

— Aún así sigo molesta contigo.

— Lo sé y te juro que haré cualquier cosa para recuperar tu confianza de nuevo.

— Te dije que nunca me escondieras cosas... Sin importar lo duro que sea. Dime cuando pasó lo de ustedes. Supongo que inició cuando emprendieron el viaje.

— No... Fue hace seis años. Cuando fuimos de viaje al lago.

— ¿El viaje en el que me enfermé? ¿Justo antes de que empezaras a salir con Elijah?

— Si...

— Ahora todo tiene sentido... Siempre te ponías tensa cuando Hayden estaba cerca y él... Oh. Esto explica todo.

— ¿A qué te refieres?

— Después de que regresamos del viaje, Hayden hizo otra reunión esa misma semana con sus amigos en la que tú no estabas. Estaba a punto de entrar a su cuarto, pero había escuchado risas, así que decidí espiarlos... Una chica quería besar a Hayden, pero él se apartó. La chica exigió respuestas. Ella tuvo las agallas para pegarle en el cachete. Iba a entrar a su cuarto para sacarla de la casa, pero vi el rostro de Hayden... Parecía arrepentido. No logré escuchar muy bien lo que dijo, pero dijo que no podía seguir haciendo eso. Dijo que había otra chica en la que no podía dejar de pensar y se río al mencionar que la chica no sabía nadar.

— ¿Eso fue lo qué pasó? Pero sigue coqueteando con chicas.

— A veces mi hermano puede ser un idiota. A lo mejor eso explica la razón por la que nunca tuvo una novia mientras estaba en la universidad. Al parecer eras demasiado importante para él y se dio cuenta que perdió su oportunidad contigo. —Carina hace una pausa al observar mi cara de confusión.— Si me hubieran dicho lo que había sucedido entre ustedes dos, probablemente me hubiera traumado durante un día o dos, pero sé que lo hubiera superado. Ahora sé que eres demasiado importante para Hayden y está loco por ti... Aún lo está, pero lo lastimaste cuando te vio con Elijah. Yo creo que tienes que decirle que también estás enamorado de él. Se merece la verdad.

— Lo haré... Si me da la oportunidad.