Hiroshima((poemas))

Preciosa Tristeza.

Aquella noche solo chispeaba pero las gotas de lluvia golpeaban contra el suelo como si fueran martillos cayendo en el hielo, aunque en este caso era yo lo que se rompía por dentro a cada golpe.

No podía dormir y aquel sonido se agudizaba en mi cabeza debe de ser lo mismo que siente y escucha la persona que recibe un tiro a quemarropa en el duro pero a la vez frágil craneo.

Me imaginaba que en el momento menos esperado un cuervo picotearia en el marco de la puerta como en aquel cuento o como en aquella serie que vi hace tiempo.

A lo lejos se escuchaba como rugia la tormenta en su lucha de conseguír cubrir completamente el mundo hablando metafóricamente y en mi habitación entre trueno y trueno no dejaba de decirme a mi mismo: nunca más, nunca más ,nunca más pensando en aquella chica que amé tanto.

Entonces en ese momento estando más que callado mis nudillos relataban mil historias escritas con sangre en el suelo sobre el que estaba arrodillado y las paredes donde estaban puestas esas fotos, esas fotos donde parecía que de verdad nos amabamos como en aquellas antiguas historias mitologícas de amor.

Aunque despues de todo aquello este Orfeo se daria la vuelta en la puerta del infierno a darse cuenta que la serpiente que mato a su Bella Euridice y su querida Euridice son el mismo ser y que no vale la pena sufrir más por una mentira que se alzaba en llamas sobre un cielo oscuro y nubloso.

Quizas el cielo llorase porque ya no estábamos juntos o quizas solo fue una estúpida imaginación.

Ya lo dijo el cantante Canserbero que en paz descanse "pudo haber sido cualquier cosa incluso el aleteo de una mariposa pero el echo esque nos perdimos para siempre"

La vida es como una infección que te consume sin razónes estaba tan herido, tan confundido, tan enfadado que sentia como si hubieran millones de minúsculos cristales recorriendome por las venas. No alabes mi poesía nunca seré poesía. Soy pena, soy un muerto viviente y encima los sentimientos me fusilaban a lo Federico García Lorca.

Me siento preso si ya no soy suyo. Las cicatrices de mis brazos no dejaban ni dejan de arder, no dejan ni dejaban de hablarme de hablarme sobre ella. El amor me susurra y los susurros me estrangulan en mi mente marcada a fuego con aquellos recuerdos y
con aquella frase de Bukowski "encuentra lo que amas y deja que te mate".

Esas lágrimas no erán de atrezzo. Algunos pensarán que exagero con mis escritos. Eso significará que nunca han amado de verdad a esa persona y que sus corazones sigues llenos de esa sustancia vital.

Mis conocidos diran tiempo al tiempo que ya llegará el señor olvido pero desconocen que el tiempo y el olvido son mis mayores enemigos ya que con el tiempo y el olvido mis heridas solo se abren más y aumenta el dolor.

Alguien dijo que no llueve eternamente pero el mundo gira y gira y gira y al final la lluvia siempre vuelve.