Cuentos de Berk

¡Lokiados!

Si había un día en que los vikingos de Berk odiaban y ansiaban que llegara, ese sería el día de Loki.

En cualquiera de los casos, las bromas inundaban la isla. Podías considerarte suertudo si no caías en ninguna de las bromas o ser el perpetrador de estas.

¿Y cómo le fue a Hicca en su primer día de Loki en Berk? Pues digamos que fue sin duda una nueva experiencia.

...

Era una mañana tranquila en la isla vikinga conocida por su tribu de los Gamberros Peludos. En una de las cabañas que residían en lo alto de una colina se encontraba una chica de cabellos castaños y ojos tan verdes como el bosque durmiendo plácidamente en su cama hasta que los cantos de los Terribles Terrores la despertaron de su letargo.

Se levantó de su cama y se alistó para bajar a desayunar junto a su pareja, quien arrastraba los pies claramente intentando mantenerse despierto. Cuando finalmente decidió iniciar su día se acercó hasta la puerta de su hogar y la abrió lista para respirar el aire fresco.

Solo para que un objeto saliera disparado a toda velocidad y le terminó dando en toda la cara.

-¡¿Pero qué demonios?!- exclamó sorprendida y cuando logró limpiarse los ojos se dió cuenta de que era una tarta de manzana.- ¡¿Quién fue el idiota que hizo esto?!

Y su respuesta llegó sola cuando escuchó un par de risas que salían de unos arbustos y el culpable, o mejor dicho dos, salieron de su escondite.

-¡Ja! ¡En toda la cara!- se burló Brutilda.

-¡Lokiada!

Ambos gemelos se dieron los cinco e Hicca estaba a nada de lanzarse para darles un buen golpe. Chimuelo había escuchado toda la conmoción y no pudo evitar doblarse y sostener su estómago debido a las fuertes carcajadas que estaba soltando.

La lista de asesinatos de Hicca acaba de añadir a una nueva víctima.

Los ojos de Hicca se dirigieron hasta el suelo y se dió cuenta de que había un hilo fino que llevaba hasta una pequeña catapulta, la cual sospechó fue activada cuando abrió la puerta y por eso fue víctima de la broma.

-¡Tu no te rías!- le gritó a Chimuelo, aunque su regaño no fue del todo efectivo cuando tenía toda la cara manchada y eso sólo aumentó las risas del dragón.- ¡Y ustedes dos! ¡¿Por qué fue eso?!

-Por el día de Loki, duh.- respondió Brutacio como si fuera algo obvio, pero Hicca solo se quedó confundida.

-¿Día de Loki?

-Oh vamos, ya sabes, ¿Loki? ¿No te suena de nada?

Hicca solo negó con la cabeza.

-Oh...- los gemelos se voltearon a ver y sonrieron de forma maliciosa.- Esto va a ser divertido.

La chica solo vió como ambos comenzaron a correr y ahí finalmente procesó todo lo que acababa de ocurrir. Ya era demasiado tarde para perseguirlos y le mandó una mirada asesina a Chimuelo, quien ya se estaba calmando.

-Ay, por los dioses-pfft. Perdón, renacuajo, pero tengo que admitir que tu cara fue bastante graciosa.- Chimuelo incluso tuvo el cinismo de pasar su dedo por la mejilla de su novia para tomar un poco de la tarta y llevárselo a la boca.- Pues no está nada mal, eh.

Está demás decir que Chimuelo terminó ganándose una marca rojiza con la forma de mano en uno de sus cachetes.

...

-¿Un día para las bromas?- repitió Hicca de forma curiosa después de la explicación que Astrid y Patapez le habían dado.

-Básicamente.- la rubia se cruzó de brazos.- No es una festividad como tal, pero sin duda a los gemelos les gusta tomar ventaja de éste día porque a su "lógica" no pueden ser castigados si el día tiene ese propósito.