Lisa y Jennie integrantes de la famosa banda de K-pop Blackpink. Se conocen desde que tenían 15 años cuando emprendieron en un camino hacia la fama y el éxito, después de 13 años, en la cima de la montaña, verán el lado malo de la fama.
Ahora solo p...
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Lisa POV.
Siempre pensé que alcanzar la cima significaba dejar atrás todos los problemas. Supuse que al tener todo lo que siempre quise, me sentiría en las nubes, flotando en un éxtasis eterno. Sin embargo, la realidad es otra. Lo que me lleva al éxtasis es el éxtasis.
Estar aquí, frente a todos ellos, me llena de miedo. La presión de mantener una imagen perfecta se convierte en un peso insoportable, una losa que aplasta mis sueños y mis esperanzas.
La fama y el éxito se han convertido en una prisión dorada, donde la libertad es solo una ilusión. Cada paso que doy, cada palabra que pronuncio, está bajo escrutinio constante. La más mínima equivocación podría ser mi perdición, mi caída al abismo del olvido.
Estoy jodida.
17 de septiembre de 2023
Seúl, Corea
—Salen en 15.
Estaba asustada, nerviosa. Faltaba este y era el fin del tour, ya estaba agotada. Sentía que me pesaba el cuerpo.
De forma despreocupada fui al baño de mi camerino, saqué una pequeña píldora y la puse debajo de mi lengua. De forma instantánea sentí un rayo de energía. Ahora sentía el hormigueo por todo mi cuerpo. Salí, vi todo a cámara lenta. En el andamio que subía al escenario estaba Rosé, que me recibía siempre con una sonrisa, como la extraño.
— ¿Estás bien? Me preguntó. Sin embargo, no la escuché, estaba tan concentrada en prepararme que no me di de cuenta de su tristeza.- —¡Lili!
—¿Qué decías?—dije de forma desinteresada.
—Mm, que sí estabas bien. —Asentí ligeramente. — ¿Cuándo terminemos a dónde me vas a llevar? Estoy emocionada.
Fruncí el ceño. ¿Llevar?
Ella pareció notar mi mirada.
— Ayer me dijiste que me ibas a llevar a un lugar especial al terminar. ¿Ya no?
— Rosie, estoy cansa- —me interrumpió. —Está bien, ya me acostumbré.
Iba a responder, pero ya habían llegado Jisoo y Jennie.
UNA SEMANA DESPUÉS.
Wonyoung estaba descansando en mi pecho. Estoy incómoda, me la quiero quitar de encima, pero no puedo, pues yo fui quien la invite.
—No te corriste. ¿Pasa algo?
— No. —La fui quitando de encima de forma ruda y despreocupada. —Voy a bañarme. ¿Te pido el Uber o viene tu manager?
