En la fría oscuridad de su cuarto, decidió que aquella fatídica discusión que hace un par de horas había sido la ultima que tendría en esa casa, el joven Aziraphell tomaba sus cosas, nada incensario para el, solo ropa, artículos de limpieza personales y sus libros favoritos, todo lo que podía entrar en una maleta para el, lo indispensable pensaba.
La pelea con su abuelo no era sorpresa, aquel hombre mayor siempre iniciaba una discusión con el por cosas sin sentido; Pero esta última, había escalado muy lejos cuando su abuelo hizo hincapié en la apariencia de Azira.
-¿Por qué no actúas como un verdadero hombre, que esperas para entablar una relación con una dama de buena familia como la nuestra, piensas que con esa apariencia alguien se fijara en ti? ¡compórtate como alguien de nuestra familia¡
Las palabras de su abuelo resonaban una y otra ves la mente de Azira (cobarde, afeminado, raro, débil) el había intentado por mucho tiempo enorgullecer a su abuelo pero era en vano, siempre siendo cortes y educado, fue el mejor de su generación en el colegio, opto por estudiar finanzas para tener cercanía con aquel hombre mayor pero sin importar nada el abuelo parecía odiarlo.
Metatron, la cabeza de la familia, un señor de edad avanzada con costumbres de tiempos pasados, sus tres nietos lo querían pero no compartían su forma de pesar tan cerrada y anticuada, Gabriel el mayor de los tres hermanos, antes trabajaba como asistente y mano derecha de un poderoso hombre pero un rumor ocasionó que perdiera su trabajo, no es que le hiciera falta ya que la familia entera gozaba de buena posición económica pero ahora se dedica a enseñar en una escuela privada y eso le encanta.
Azira el segundo hermano trabajaba en unas oficinas como contador en el centro de la ciudad, siempre dentro de una pequeña oficina haciendo cuentas para sus jefes. Cansado, harto y mentalmente fatigado de todo al punto de sin previo aviso renunciar un día, cosa que también lo hizo acreedor de un reclamo y una humillación por parte de su abuelo.
Muriel la mas pequeña de los tres aun estudiaba el bachillerato, lo hacia en la misma escuela donde Gabriel imparta clases, esto aliviaba al mayor pero en ocasiones molestaba a Muriel por la sobreprotección.
Esa noche siendo lo mas silencioso que pudo Azira fue descubierto por Muriel.
-Se puede saber que haces?... Y esa maleta?- Pregunto Muriel con la voz haciéndose cada vez mas tensa al percatarse de la acción.
-quieres guardar silencio
Azira reclamaba con voz baja.
-No pienso quedarme un minuto mas aquí- susurro de forma que solo ellos dos escucharan.
-¿A donde piensas ir?- Muriel empezaba a sollozar, asustada de no volver a ver a su amado hermano, intento detenerlo aferrándose a el, pero era inútil Azira ya había tomado su decisión, no quería lastimar a su hermanita pero quería salir lo antes posible de ahí.
-Muriel, mi querida Muriel, no puedo seguir soportando la vida con el abuelo, escuchaste la pelea que tuve con el, no pienso volver a repetir esa situación, ni pasar por alto otro maltrato de su parte, pero no tienes de que preocuparte en cuanto me sea posible te visitare.
Abrazo con ternura a su hermanita para después darle un beso en la frente dejándola con los ojos vidriosos al borde del llanto.
Bajo las escaleras, cruzo el pasillo, abrió y cerro la puerta principal todo como si fuera un ratoncito escapando, al darse la vuelta en el umbral de la casa se topo frente a frente con Gabriel, asustado por la mirada desafiante que el mas grande poseía sintió por un momento que tendría que regresar a la casa, empezó a temblar pero se mantuvo firme a su decisión frunciendo el seño, se iría así tuviera que enfrentar a su hermano, sin decir nada camino de frente pasando de lado.
Gabriel lo llamó por su nombre, Azira tomo todo el valor que pudo para voltear y encararlo pero su sorpresa fue grande que al girarse y ver la mano de su hermano extendida con una cantidad considerable de billetes.
-¿Qué es esto?- Azira cuestiono.
-Es dinero, tonto – Respondió Gabriel
- Veo bien que es ¿pero por que me lo das?- Aziraphell lucia confundió y dudaba si aceptarlo o no
- Por que te hará falta, no quiero que nada malo te pase ni que te haga falta nada, eres mi hermano menor es mi deber cuidarte y también es por que te quiero.
Aziraphell había tratado de contener el llanto hasta ahora, pero escuchar a su hermano mayor expresarse de esa forma de el no pudo mas, se abalanzó a darle un abrazo mientras unas lagrimas recorrían su rostro, no se verían por un tiempo pero no significaba que fuera para siempre aun así no había pasado mucho tiempo lejos de su hogar .
-Si necesitas algo no dudes en llamarme además sabes donde encontrarme.- Dijo Gabriel terminando el abrazo.
- Gracias Gabriel, lamento hacerlo de esta forma, pero se que el abuelo me detendría solo para seguir dándome ordenes, cuida a Muriel no quiero que la pase mal en mi ausencia.
-Lo hare, ella es mas fuerte de lo que creemos, es nuestra hermana después de todo, te ruego no me digas a donde te iras así no tendré que mentirle al abuelo de tu paradero.- Gabriel alzo la mirada hacía el cielo para después suspirar.
-Te llamare cuando crea prudente.
Y sin mas Aziraphell tomo su maleta, abrazo de nuevo a Gabriel para después seguir su camino, la noche seria larga.
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Al otro lado de la cuidad muy lejos de aquella dirección, se apreciaba entre sombras a dos hombres en un callejón uno alto con cabello grisáceo, con una gabardina gris oscuro y desgastada, con cara malhumorada fumando un cigarrillo de nombre Hastur.
Mientras que el otro un poco mas bajo de piel oscura vestido totalmente de negro con un rostro de indiferencia , a quien conocían como Ligur.
-Sera mejor que no tarde mas tiempo ese maldito infeliz- decía Hastur entre dientes mientras apagaba su cigarrillo solo para encender otro al instante.
-Lo hará, solo le gusta mantenerlo interesante… volvamos a dentro y esperemos a que llegue - Respondió Ligur
No avanzaron ni dos metros antes de divisar a lo lejos un auto, para ser precisó un bentley 1940 negro como la noche, que se estaciono a unos pasos y de este salió un hombre alto con una delgada aunque amenazante silueta, su cabello era rojo como las llamas del infierno portaba unos lentes oscuros y una sonrisa cínica que a muchos estremecía, saludo a la pareja acercándose lentamente a ellos.
-¿Crowley, algo noche para tus lentes no crees?-
Rio Ligur intentando burlarse del pelirrojo.
Crowley no contesto solo sonrió haciendo enfurecer mas a Ligur.
-¿cuanto tiempo sin verlos chicos? Por favor díganme que ya son pareja
Enfurecido y un poco al descubierto Ligur tomo de la camisa a Crowley decidido a dejarle uno o mas golpes antes de que el reaccionara, por otra parte Hastur intento detenerlo sujetando de los hombros, ocasionando diversión en el pelirrojo.
-YA BASTA IDIOTAS- una voz femenina se escucho a lo lejos.- ¿Por que tardan tanto?- una mujer de baja estatura salió del bar viendo a los tres hombres con fastidio.
-BEELZ!!! (grito con sorpresa Crowley) ¿Cómo esta la hermana mas hermosa y enojona de este mundo?
Beelzebu era la hermana de Crowley si bien solo eran hermanastros se llevaban muy bien, vivieron desde pequeños y sin importar que no los unía la sangre siempre podían contar uno con el otro, ella era mayor por un par de años, pocas eran las veces que se le veía sonreír y crow sabia por que de su seriedad pero nunca lo mencionaba.
-Hola Anthony, no creí que regresarías a la cuidad- saludo beelz
-Llegue en la mañana, quise instalarme en un departamento antes de avisar que había regresado por eso los llame tan tarde.
Ligur ya había soltado a Crowley, si bien eran amigos sus bromas a veces terminaban en ligeros golpes y en mas de una ocasión llegaban a pelear enserio pero al final bebían y reían juntos.
-¿Vamos a entrar al bar o no? me congelo aquí afuera- Hablo Hastur con medio pie dentro del establecimiento.
-La primera ronda va por tu cuenta por tu regreso, cretino- Ligur entro detrás de Hastur.
Los hermanos aun estaban afuera, pues la mayor quería hablar a solas un minuto con el recién llegado.
-Es bueno verte aquí, madre te extrañaba mucho y … también nuestro padre… dice que te extraño.- dijo Beelz con un todo melancólico
-Sabes que se cuando mientes verdad? El no me extraña y menos por que fue el la razón por la que me fui desde un principio.- Crowley se escuchaba decepcionado
-Crow … papá te ama y lo sabes el quiere verte otra vez, quiere hablar contigo.- Beelz comento antes de ser silenciada por Crowley.
El no quería hablar en ese momento de nada que fastidiara su regreso y quería divertirse a lado de sus amigos
-No regrese para estar ni triste ni enojado hermanita ese es tu trabajo, así que mejor entremos a beber algo antes de que esos dos empiecen a besarse y tocarse entre ellos culpando al alcohol.- Dijo Crowley mientras entraba al bar.
Beelz solo cruzo sus brazos y se encogió de hombros para seguir detrás de su hermano, no se rendiría, pues quería reunir a su padre y hermano para que hicieran las pases pero no era el momento para presionarlo.
La noche apenas comenzaba aunque no todos podían pasarla felices y contentos, las decisiones que se toman traen consigo consecuencias que se tienen que aceptar, sean buenas o malas.
FIN CAPITULO 1
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Hola 💜
soy Lady_Ashtoreth 🐨, y quiero compartir esta historia que hice, es mi primera historia, Espero les guste
