En Mis Memorias | Fanfic Snarry

Capítulo 2

Nuevamente la noticia de que se convirtió en el nuevo buscador de Gryffindor se regó como la pólvora, era un buen tema de conversación tanto así que hasta los padres del chico se enteraron antes de que él se los comentara. Claro, su padre le escribió una carta comentándole que el también fue buscador y dándole consejos. De parte de su madre, felicitaciones y un fuerte hincapié en que se cuidara mucho, que era un juego peligroso, era normal salir herido pero que se asegurara de ser prudente. Iba caminando con Ron cuando se encontraron con los gemelos, nuevamente Ron le contó que estos eran miembros del equipo, golpeadores, Harry obviamente lo sabía porque era la segunda vez que lo escuchaba y jugo varios juegos con ellos, pero naturalmente se hizo el que no sabia nada y lo escuchaba por primera vez, la broma de los gemelos fue exactamente la misma de sus recuerdos: "nadie a muerto en años, solo se esfuman de vez en cuando pero aparecen en unos meses...", sinceramente ese par era malicioso, en su momento eso lo puso muy nervioso, no era lo mejor que decirle en esa situación. Al chico le seguía molestando lo que había sucedido en el campo, la puerta por la que se había ido con McGonagall, de la que se estaba alejando el estudiante de Slytherin (que era la única persona por allí en ese momento) quedaba de frente a sus compañeros, y por su ubicación para ver la escoba y poder hechizarla tendría que haber salido unos pasos de ella, aun si era posible que no le prestaran mucha atención en su momento de haber sacado la varita para lanzar el hechizo en definitiva hubiera llamado la atención de alguien, pero nadie había visto nada. ¿Sería que aquel joven en realidad no tenía nada que ver y solo era un observador más? Entonces el mago debía estar en otro lado desde donde podía verlo y nadie notaria si sacara la varita. Por otro lado, la razón para hacerlo es lo que más le generaba ansiedad, ¿para que hechizarían la escoba en ese momento? No había pasado antes en lo que recordaba, Harry estaba seguro que aun no había hecho nada para que pensaran que era mejor deshacerse de él así que posiblemente no había sido Quirrell, además, no lo había visto por ningún lado. ¿Podría ser realmente que había alguien más que tuviera los mismos recuerdos que él?, dependiendo de quien fuera podría ser útil o un completo dolor de cabeza, y no podía confirmar si había sido echo con intención de solo hacerlo fallar o con intención de hacerlo caer.

Puede que sus amigos malinterpretaran su preocupación por  ese asunto como preocupación por unirse al equipo de Quidditch, porque dijeron exactamente lo mismo que el recordaba aun si el no había expresado en esta ocasión su nerviosismo por ese asunto ya que no aplicaba en esto.

- Estoy segura que tu padre a tenido que decírtelo ya, pero no tienes que estar nervioso por hacer el ridículo, lo harás bien, está en tu sangre ser un buscador, tu padre fue un gran jugador. Ven, te lo mostrare. - dijo Granger tomándolo del brazo y llevándolo nuevamente en esta ocasión a ver los trofeos donde salía el nombre de su padre.

- Vaya Harry, tu padre es genial. - dijo Ron viendo los trofeos.

- Si... - fue lo único que respondió el chico de lentes.

mientras iban de camino a su habitación Harry dudo un momento en subir a la escalera, claro que esta reacción fue extraña para sus amigos, pero como no tenía una excusa convincente no tuvo más opción que subir y como esperaba la escalera se movió. Ron y Hermione fueron rápidamente hacia la puerta antes de que la escalera cambiara de lugar, pero Harry recordaba exactamente lo que encontrarían más delante.

- No debemos estar aquí. - dijo una vez estuvieron dentro de aquella oscura habitación con antorchas que se encendían cuando había alguien cerca de ellas.

- Por supuesto que no debemos, es el tercer piso, está prohibido. Vámonos rápido. - dijo Hermione cuando la gata de Filch salto dentro de la habitación asustando a la chica.

No les quedó de otra que correr nuevamente hacia la habitación al final de aquel pasillo, eso o ser atrapados por el celador, y sinceramente puede que fuera mejor que este los encontrara, era menos peligroso pero nuevamente era información que él no debía tener aun así que no podía decirle a sus amigos "no entremos allí, hay un perro de tres cabezas dentro llamado Fluffy", porque obviamente le iban a preguntar como sabía eso. Hermione uso el hechizo para abrir la puerta cerrada y todos entraron, Harry no se separo de la puerta y de inmediato puso su vista en el animal que dormía. Cuando sus amigos voltearon antes de que comenzaran a hablar fuerte (pensando que estaban a salvo porque Filch se había ido) Harry les tapo la boca con la esperanza de que Fluffy no los escuchara esta vez y se despertara, salieron de la habitación con cuidado y cerró la puerta antes de que el gran perro se diera cuenta de que ellos habían entrado, al menos en esta ocasión se ahorraron el casi ser comidos por él.