Un cálido hogar
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Evangeline
Un par de gafas oscuras han sido suficientes para ocultar mis ojos y las lágrimas que los han empañado, pero no para esconder el dolor que perfora mi cuerpo. Lo siento aún presente calando mis huesos, destrozando mi alma. Este día se lleva consigo una parte de mí; hoy se sepulta un fragmento de mi corazón bajo un poco de tierra en un lugar solitario y frio. Nunca pensé que me vería vistiendo un traje negro, con una rosa blanca en mis manos, contemplando el brillante ataúd de madera donde reposa mi madre. Creí que pasaría mucho tiempo antes de que llegara este instante, pero, lamentablemente, no fue suficiente.
Los pequeños permanecieron en la mansión y, a pesar de que todos pensaban que me quedaría con ellos, en el último momento reuní el valor necesario para asistir. Esto no me hacía bien, pero pensé que estar aquí, frente a su despedida, me ofrecería una perspectiva más clara y me ayudaría a entender lo que estaba ocurriendo. Sin embargo, todo sigue pareciendo una ración de mis pesadillas.
No puedo evitar sentir que esto es profundamente injusto. He luchado tanto por tenerla en mi vida y, después de todo me la han quitado, dejándome un sabor amargo de desamparo.
Sé que necesito darme una bofetada de realidad y aceptar que nunca volverá, pero prefiero vivir engañada, porque me es más doloroso aceptar que nunca volverá, a quedarme esperándola una vida entera. Ahora entiendo por qué nunca pudo aceptar que yo estaba muerta, incluso después de dos décadas. La posibilidad de volver a verme fue lo que la mantuvo en pie. ¿Cómo podré seguir adelante sin esa esperanza?
Papá se encuentra abrazado a mis hermanos en la primera fila, no me he animado a acercarme a ellos. Me he escondido en el fondo de la Iglesia, avergonzada de encontrarme aquí, llorando por algo que fue mi culpa. Me he excluido yo misma de su despedida, permaneciendo lejos de las personas que la lloran y le dan un adiós que será eterno. Enzo se mantiene a mi lado, esperando que de la orden para irnos, pero me retengo lo más que puedo. Hasta que veo a mi padre de lejos, deja una bella rosa sobre el cajón y aunque intenta forzar una compostura, un sollozo doloroso lo quiebra ante todos.
Siento como mi pecho se comprime, suelto la rosa sobre la banqueta y volteo hacia Enzo.
—Llévame a la mansión.
Él asiente y me escolta hacía fuera de la Iglesia, donde el auto que me trajo esperaba por mí. Diez minutos, ese fue el tiempo que pude permanecer. Soy una cobarde. Mi corazón me engaña y reprocha que la estoy abandonado, que la estoy dejando sola en ese cajón frío y oscuro. Pero esa no es mi madre, es solo un cuerpo sin vida. Mi madre será siempre la mujer que me enseñó a valorar la familia, mantenerla unida y amarla, sin importar sus defectos. Era la mujer más comprensible del mundo, la más atenta y cariñosa. Fue la mejor nonna para mis hijos, fue la persona que priorizo nuestro futuro y se entregó para eliminar el peligro que amenazaba contra él. Así la recordaría.
Al cruzar las puertas de la mansión fui recibida por Bella, quien me esperaba sentada en las escaleras. Con solo verme se incorporo del escalón y corrió hacia mí para abrazarme.
—Cariño, ¿qué sucede? — acaricie su larga melena azabache.
—No me dejes sola tanto tiempo. — suplicó con miedo, en lo que se aferraba a mí.
—Lo siento, mi amor. — besé su coronilla para tranquilizarla —¿Los melli?
—Juegan en su cuarto.
—¿Vamos un rato con ellos? — Bella asiente y sin soltarme subimos al cuarto de los pequeños.
El proceso de recuperación también ha sido difícil para ella, pero por otra razón. Bella atravesó una situación traumática y le ha costado bastante volver a sentirse a salvo, tiene pesadillas constantemente y cuando eso sucede recurre a nosotros para dormir a nuestro lado. Me gusta poder hacerla sentir protegida, que sepa que siempre estará a salvo con nosotros. Si algo le hubiera pasado no sé qué hubiera hecho. Si tocan a Bella es como si tocarán a mis mellis, soy capaz de destruir el jodido planeta y encontrar al culpable.
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Lazos Inquebrantables
عاطفيةLIBRO 2 DE LAZOS ENTRELAZADOS// Del dolor se forman las almas inquebrantables, de las heridas nace la resiliencia, del miedo se forman las pesadillas. Y luego de tres años, nuevas sombras han surgido, nuevas amenazas que harán temblar el mundo es bu...