Oliver Knight, un niño normal de Bellwood se va de viaje por todo el país durante las vacaciones de verano con su amigo Ben Tennyson. Sin embargo, su verano normal cambiará su vida cuando dos meteoritos caigan a la Tierra.
1: Aclaro que a partir de...
Bajo el brillante sol de la ciudad de Nueva México, en un remoto pueblo apartado de la civilización, la banda se encontraba reunida, recibiendo la guía de un viejo amigo del abuelo Max en ese momento.
???: La leyenda dice que el cazador de sueños protege al soñador de todo tipo de pesadilla, así las plumas protegen y bendicen a las personas que están durmiendo – dijo parandose junto a Max frente a un atrapasueños.
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Luego, tanto el como Max siguieron su camino, mientras que los dos nietos Tennyson y Oliver se quedaron en el puesto. Ben solo atino a bostezar, la pelirroja se giró a verlo y lo empujo para seguir con el recorrido.
Gwen: Hablando de sueño...
Ben: Sé que el señor Green es viejo amigo del abuelo, pero este viaje ¿no podría ser más...? – Ben se detuvo al ver a una chica de piel morena, cabello negro y una vestimenta azul, danzando.
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Ben: Genial... - inmediatamente quedo embobado por la chica por lo que rápidamente se acercó al señor Green y al abuelo Max para sorpresa de Oliver y Gwen quienes se miraron extrañados y luego lo siguieron.
Sr. Green: Ella es mi nieta, Kai.
Max: La última vez que la vi, apenas si podía caminar – dijo sonriendo con confianza a su amigo.
Sr. Green: Esta danza navajo, es una ceremonia.
Ben: ¿Sabes? Quería ver una de estas antes de que el verano terminara – decía el joven observando la danza navajo.
Oliver: ¿Y desde cuanto te gustan las danzas tradicionales? – pregunto muy extrañado ante el repentino interés de su mejor amigo hacia la danza.
Ben: Siempre me han gustado, ¡son geniales! – dijo terminando de ver la danza.
Kai terminaría de bailar y se acercaría a su abuelo, Ben la miraría embobado, mientras que Gwen notaria algo raro, elevo su mirada al cielo el cual comenzó a escurecerse, por unas espesas nubes negras
Gwen: ¿Segura que no era una danza para la lluvia?
Kai: Obvio, ¿Por qué? – pregunto para después darse cuenta del oscurecido cielo.
