Capítulo 26

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La escena que se estaba desarrollando en ese momento es muy distinta a la que pensarían los chicos que está pasando.

Luego de que ambos chicos fueran a la habitación, fueron detrás de ellos para intentar escuchar algo a través de la puerta pero lo único que sintieron fue silencio hasta que se comenzó a escuchar como había movimiento en la habitación y cosas cayéndose de su lugar. En ese momento decidieron retirarse de la puerta y darles la mayor privacidad posible no sin antes que se oyera un grito de Mingi diciendo que usaran protección.

Mientras tanto dentro del cuarto iniciaba una fogosa pelea entre ambas lenguas de los chicos. Se encontraban uno encima del otro besándose y toqueteándose, se separaban brevemente para tomar aire y volvían a unir sus labios con fervor.

—No volvamos a pelear por favor. —Hongjoong miró a los ojos al pelinegro como si se tratara de una súplica. Este solo lo miró de vuelta dándole un último beso como respuesta.

—Nunca más. —Se acomodaron en la cama del pelinegro y procedieron a ver alguna película o serie que les llamara la atención. —y tampoco vuelvas a rayar paredes sin permiso de los dueños, porque ahora mis papás se pondrán insoportables.

—Ay ya, empezaste con tus weas civiles. —dijo Joong mientras volvía a besarlo para que no siguiera discutiendo.

Pasados los días, todas las parejitas se hallaban en buenos términos. Mingi había vuelto de su pre universitario y estaba terminando de alistarse para salir con Yunho; Wooyoung y San estaban enterrados en los brazos del otro viendo una película en el sofá del living; y por último Hongjoong y Seonghwa no se encontraban en casa puesto que habían salido a pasear o algo.

Jongho estaba harto del ambiente tan cursi que llenaba la casa. Se lo había comentado a Wooyoung y este solo le contestó “solo estai celoso que tenemos cachita y tú no”. No aguantaba un segundo más dentro de la vivienda.

Decidido a salir de ahí y no solo, fue hasta la habitación de Yeosang para que éste fuera con él. Entró sin tocar y se topó al chico en mitad de una partida de “League of Legends”, ni siquiera eso lo detendría a arrastrarlo a su pequeña aventura. Se acercó al chico y le arrancó los audífonos.

—Me tienen hasta el pico con lo jugosos que son. Vamos a otro lado.— Apagó el computador antes de que el mayor pudiera reclamar, tomó la billetera de Yeo lanzándosela para que la guardara y salió de la habitación esperando que él lo siguiera. Volteó y efectivamente, el chico iba detrás de él.

***

Se hallaban dando vueltas por el mall buscando algo interesante para hacer. Jongho estaba hablando como nunca y Yeosang solo lo escuchaba. Se compraron un café y fueron a sentarse a la plaza de enfrente para seguir conversando y tomar el café con tranquilidad.

—Y ni siquiera sé que chucha lo que son el Wooyoung con el San, trato de descifrarlo pero no puedo. —Era la quinta vez que Jongho repetía lo mismo y Yeo ya estaba harto de escucharlo hablar sobre el tipo de relación que tenían sus amigos. —También juraba que el weon del Mingi con el Woo salían pero al parecer me equivoq—.

—Cariño, cállate un rato. Nunca salimos ni hacemos nada y ahora que podemos solo te dedicas a criticar. —Yeosang tuvo que interrumpir al menor, ya no soportaba oirlo criticar a otras personas, ya bastante tenía con escuchar a Seonghwa hablar mal de sus compañeros de carrera.

—Weón, te he invitado caleta de veces y siempre me decí que no. —Refutó el castaño mirando al chico.

—Bueno, ahora estamos saliendo. Hazte un panorama. —Yeo se levantó de su lugar para botar el vaso de café vacío en la basura y se quedó parado frente al menor.

Viviendo a lo chilensis | ATEEZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora