Capítulo 14

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Habían terminado de ver la maraton de "Scary movie" casi en su totalidad, casi porque se aburrieron a media maraton, así que decidieron hacer algo más para no caer en el sueño tan pronto. Wooyoung propuso jugar UNO, por lo que Mingi se paró de inmediato para ir a buscar las cartas que se encontraban en su habitación. Comenzaron tranquilamente pero al avanzar el juego las cosas se empezaron a calentar.

—RENUNCIO A JUGAR CON UN TRAMPOSO. —Gritó San soltando las cartas con rabia.

—¿A QUIÉN CHUCHA LE DECI TRAMPOSO? —Gritó Woo de vuelta.

—TÚ LO ERES. Tienes como diez cartas metidas en el culo. —San estaba seguro de su teoría, lo vio con cartas que después desaparecieron misteriosamente.

—¿Tení cómo comprobarlo? —Dijo Woo acercándose peligrosamente a San. —¿Querí ver si tengo las cartas metías en la raja? —Le dijo susurrando cerca de su cara.

Mingi y Yunho miraban en silencio a los dos chicos pelear, tenían la duda de si realmente el menor había escondido algunas cartas para poder ganar rondas anteriores, por lo que Mingi decidió meterle leña al fuego.

—Yo lo vi metiéndose cartas en la raja, hizo lo mismo conmigo el otro día. —Mingi se metió en la pelea riendo viendo como San se levantaba de su lugar para hacerle cosquillas al peli-oreo.

Ante la acción del rubio, Wooyoung comenzó a reír desesperadamente mientras las manos de San recorrían su cintura, rogándole al mayor que se detuviera. Entre todo el alboroto, Yunho logró divisar unas cuentas cartas debajo del cuerpo de Woo, las tomó y rápidamente las levantó en el aire.

—AQUÍ ESTÁN LAS CARTAS DE WOO. —San soltó al menor dándole un respiro observando la cantidad de cartas que había escondido para ganar suciamente.

—MENTIROSO CULIAOOOO. —Gritó Mingi riéndose.

Decidieron terminar la partida de UNO antes de que se comenzaran a matar entre ellos. Eran ya la una de la mañana, por lo cual decidieron ir a dormir para levantarse temprano al día siguiente para así aprovechar bien el tiempo. Wooyoung y San habían ido a la habitación de Jongho mientras que Yunho y Mingi fueron a la habitación de este último, ambas parejas querían tener su privacidad para estar con el otro.

Por un lado, los más altos se acurrucaron en la cama y se pusieron a conversar de cualquier tema que les cruzara la mente, estuvieron un rato jugando con sus celulares y hablando hasta que les comenzó a agarrar sueño. Ambos chicos dejaron sus celulares en la mesita de noche al costado de la cama de Mingi, se colocaron en posición de cucharita, - siendo Yunho la cuchara grande-, se dieron las buenas noches y cerraron los ojos para conciliar el sueño.

Por otro lado, en la habitación de al lado se disputaba una fogosa pelea entre la boca del peli-oreo y el rubio. Lo que menos pasaba por sus mentes en ese momento era dormir, el calor que se había formado en el cuarto los comenzaba a sofocar. Wooyoung se separó brevemente del beso para quitarle la polera a San seguida de su propia polera y volvió a unir su boca con la del mayor en un desordenado beso mientras se movían por toda la habitación buscando distraídamente la cama.

El calor iba subiendo cada vez más y el pantalón de ambos chicos comenzaba a apretarles pero en medio de todo el caos pasaron a llevar la estantería de Jongho que estaba lleno de figuritas coleccionables y para su mala suerte habían roto una de ellas. Ambos chicos pararon rápidamente lo que estaban haciendo para ver el desastre que se había creado, muchas figuritas habían caído al piso pero solo una se había roto. Ante todo el alboroto, Mingi y Yunho velozmente a ver lo que estaba pasando.

—NO ME DIGAI QUE SE IBAN A METER LAS FIGURITAS POR LA RAJA. —Mingi entró sin golpear a la habitación recibiendo un pequeño golpe por parte del más alto debido a su comentario.

—Jongho me va a matar weón. —Woo se sentó en la cama viendo el desastre que había en el suelo. San se puso la polera y se sentó junto al menor sobándole la espalda en señal de que todo estaría bien.

—No sé si va a estar más enojado por la figurita o porque ibai a culiar en su cama. —Mingi nuevamente recibió un pequeño golpe por parte del más alto.

Los cuatro chicos se quedaron un momento en silencio sin saber qué hacer, eran las 2 de la mañana del día domingo, ¿Dónde chucha iban a conseguir un repuesto para ese mismo día? En medio de su desesperación llamaron a la única persona responsable que les pasó por la mente: Seonghwa.

—Yunho, llámalo tú, a ti sí te quiere. —Le suplicó San.

—Pero yo no andaba de calentón. —Le respondió Yunho. De todas formas tomó el teléfono y marcó poniéndolo en altavoz. —¿Hwa?

—Mmm. —Contestó adormilado el nombrado desde la otra línea.

—Tenemos una emergencia... —Respondió Yunho.

—¿QUÉ? —Seonghwa despertó en un segundo con el corazón a punto de estallar.

—SEONGHWA, NOS PITEAMOS UNA FIGURA DE JONGHO Y NO SÉ DÓNDE CHUCHA LAS VENDEN, POR FAVOR NO QUIERO MORIR. —Dijo Woo suplicando.

—Voy en camino y cuando los vea les juro que... —No alcanzó a terminar de amenazarlos porque Yunho cortó la llamada.

Pasada una hora se escuchó como tocaban la puerta. Yunho fue a abrir y estaba Seonghwa quien no vino solo, venía acompañado de un adormilado Yeosang que pareciera que fue llevado a la fuerza, Yunho se hizo hacia un costado para dejar entrar a ambos chicos.

Fueron directo a la habitación de Jongho para ver lo que había ocurrido, entraron y vieron que Mingi estaba sentado en el escritorio mirando su teléfono, Wooyoung y San sentados en la cama abrazados mirando la figurita rota en el suelo. Seonghwa al ver la escena quiso matar a cada uno de los presentes, se le dio la responsabilidad de velar que no pasara nada pero fue sobornado para no decir nada y ahora se encontraba envuelto en el problema al igual que los demás.

—Wena hermanito, ¿Cómo andamio? —Mingi levantó la mirada de su celular para saludar al mayor que miraba con cara de pocos amigos.

—¿Cómo rompieron la figurita? ¿Y de qué era? —Preguntó inmediatamente el mayor ingresando a la habitación, yendo directamente el objeto roto.

—Los tortolitos iban a culiar en la cama de Jongho y ni pico idea de qué es la figurita. —Apenas Mingi dijo eso fue golpeado con una almohada que lanzó Wooyoung, pasando a llevar otra figurita que se encontraba en el escritorio siendo rápidamente atrapada por el pelinegro antes de que esta tocara el piso.

—Ya basta de pelear, tengo un plan. —Yeo sacó su computador de la mochila que llevaba. Echó a Mingi del escritorio para sentarse y comenzar a navegar, nadie le preguntó nada, sabían que estudiaba informática así que asumieron que sabía lo que estaba haciendo.

Así se pasó un rato buscando cosas, ninguno sabía qué figurita era, tenía algo parecido a una cámara con patas de araña. A todos les pareció un poco raro que Jongho tuviera ese tipo de cosas en su habitación pero se enfocaron en buscar un reemplazo de esa figura lo más pronto posible. Después de un buen rato, Yeosang encontró un vendedor que podía entregarles la figurita en menos de 24 horas, estaban a salvo.

Todos excepto Seonghwa habían ido al living y a las otras habitaciones para poder descansar. El mayor se quedó en la habitación del menor para limpiar el desastre que se había hecho, no solo la figura que se rompió se encontraba tirada en el suelo, sino muchas otras. Además limpiaría la habitación, aunque Wooyoung y San habían insistido hasta el cansancio que no habían hecho nada prefería asear la cochinada que estuvieron a punto de hacer.

Viviendo a lo chilensis | ATEEZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora