Capítulo 25

145 12 1
                                    

Habían pasado dos días desde aquella pelea entre los dos mayores de la casa. El ambiente seguía tenso entre ambos chicos, ni siquiera se dirigían la palabra aunque ambos durmieran en la misma habitación, solo se ignoraban y seguían con su día como si el otro no estuviera presente.

En cuanto al pequeño percance que tuvo con Mingi, Seonghwa fue a disculparse con él cuando este ya estaba más calmado y las cosas quedaron bien entre ambos. Había tenido una pequeña conversación con Jongho y Mingi acerca de sus palabras, resolvieron su pequeña pelea y para arreglar todo fueron a comer por invitación del mayor.

Ahora mismo se encontraban los ocho juntos almorzando, desde que se habían ido a vivir juntos, comer todos en la misma mesa ya no era tan usual debido a sus horarios que no le permitían repetir ese escenario tan seguido. El ambiente era tenso debido a la presencia de los dos mayores sentados uno enfrente del otro sin siquiera mirarse, se sentían algo incómodos y buscaban alguna forma de tratar de aliviar el ambiente.

—Yeo, dile a Seonghwa que me pase la sal porfa. —Hongjoong ni siquiera apartó la vista de su plato. Algo incómodo, Yeosang accedió a la petición del mayor y le pidió la sal a Seonghwa para luego entregársela al mayor.

—Yeo, dile a Hongjoong que sea un adulto y se dirija hacía mí en vez de andar pidiéndole a los demás que hablen por él. —Ahora fue el turno del pelinegro, quién hizo la misma acción del chico de dirigirse hacia él mediante un intermediario que en este caso era el pobre Yeosang que no se quería ver involucrado en la pelea.

Wooyoung no podía soportar verse involucrado en una situación tensa e incómoda, por lo que se sentía en necesidad de buscar un alivio cómico ante tal momento como el que estaban viviendo en ese preciso instante. Optó por tirar algún chiste clásico que fuera efectivo en causar risas, así que procedió a aliviar la tensión en todos.

—Mingi, ¿Cuánto es 34-23? —Preguntó como si de verdad tuviera una genuina duda ante tal problema matemático. Mingi se quedó un tiempo pensando y restando con los dedos para poder responderle al chico.

—11. —Respondió naturalmente para tomar un sorbo de su taza de té.

—CHÚPALO ENTONCES. —Wooyoung junto con el resto de los presentes en la mesa estallaron en risas. No se esperaban un chiste tan básico pero tan gracioso al mismo tiempo en un momento así. A pesar de que no solucionó ningún problema, pudo sacar una sonrisa en todos sintiéndose así más tranquilo.

Cuando terminaron de comer, Hongjoong se levantó de la mesa para ir a su habitación y volver con una chaqueta, dirigiéndose a la puerta para tomar sus llaves.

—Voy a volver tarde, no me esperen pa comer. —Y sin decir más, salió de la puerta sin esperar a que los demás respondieran. Los chicos quedaron con la duda de a dónde iría pero no tuvieron más remedio que esperar a que el chico no volviera muy tarde.

***

Hongjoong seguía bastante molesto con la situación, o tal vez no tanto pero parecía que Seonghwa no daría su brazo a torcer para solucionar la pequeña disputa creada entre ambos. Quería salir del ambiente pesado que había en la casa, por lo que salió a hacer graffitis con uno de sus más grandes amigos, Bangchan.

—Culeen y se arregla todo weón. —Se hallaban caminando por las calles poco transitadas de un buen barrio en Viña del mar, buscaban algún lienzo en blanco para poder rayar.

—No seai weón mi xan. —Hongjoong estaba cansado de los consejos sin sentido que le daba su amigo, era como escuchar los consejos de Wooyoung.

—Papito, no le pidai disculpas, si naah que ver lo que hizo. —A lo lejos divisaron una casa con paredes exteriores completamente blancas, les pareció el lienzo perfecto para dejar sus marcas personales.

Viviendo a lo chilensis | ATEEZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora