𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 𝑿𝑿𝑿𝑰𝑽: 𝑭𝒖𝒆 𝒖𝒏 𝒉𝒐𝒏𝒐𝒓 𝒉𝒂𝒃𝒆𝒓 𝒔𝒊𝒅𝒐 𝒑𝒂𝒓𝒕𝒆 𝒅𝒆 𝒔𝒖 𝒕𝒓𝒊𝒑𝒖𝒍𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏

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La puerta de la cabaña comenzó a abrirse, la joven se mostró algo asustada, pensando en quien podría entrar, hasta que la silueta de aquel chico de cabello negro se pudo apreciar mejor con la luz de la luna.

Shariza: ¿Stede?- pregunto asombrada.

Stede: Shh, no hagas ruido, o podrían despertar- le pidió mientras desataba sus manos.

Shariza: ¿Como fuiste capaz de traicionarnos? Y mucho mas a mi hermano- le reprocho algo triste.

Stede: Lo se, se que esta mal lo que hice, pero escúchame, lo hice con tal de que ninguno de ustedes saliera lastimado, ademas, jamas traicionaría a mi tripulación, mucho menos a mi capitana- le dijo, logrando sacarle una sonrisa a la joven pirata.

Lo sabia, sabia que su mejor amigo y fiel compañero de aventuras jamas los traicionaría.

Stede: Tenemos que irnos antes de que despierten- dijo, para luego tomarla de la mano y ambos salir casi corriendo del lugar.

Estaban bastante lejos del lugar, así que seria dificil para la tripulación de Alvida y Buggy encontrarlos, ya que la isla era bastante grande, por suerte Stede había memorizado el camino hacia donde se ubicaba el padre de la joven.

Shariza: No logro ver nada- dijo con los ojos medio cerrados.

Stede: Descuida, tan solo no te sueltes de mi mano, ya casi llegamos- dijo, pero de repente una voz lo detuvo.

Buggy: Con que escapando, debí suponerlo- dijo el payaso.

Ambos jóvenes voltearon a ver al payaso, estaban anonadados, preguntándose como se pudo haber dado cuenta de que estaban ahí, lejos del campamento.

Buggy: Estaba cumpliendo tu mas grande sueño, muchacho, te conseguí a la joven que deseabas tener solo para ti, incluso te considere como un hijo para mi ¿Y todo para que? Para que me traiciones de esta manera- dijo sonando decepcionado.

Stede: Es cierto, cumpliste mi petición, pero trataste de lastimarla y eso nunca te lo voy a perdonar- dijo molesto, para después sacar su espada y ponerse en modo de ataque.

Buggy: ¿Entonces, así sera? Bien, si insistes- dijo mientras se quitaba el saco que tenia puesto- Pero te diré una cosa, enviare a ambos al otro mundo al igual que a Shanks, al chico del sombrero de paja, y a la tripulación entera de ambos- termino de decir, para después comenzar a dividir su cuerpo en partes, haciendo que cada extremidad volara en el viento, para después ver que estos comenzaran a volar hacia ellos.

En ese momento, Stede puso a la joven detrás de su espalda, tratando de protegerla, las extremidades de aquel payaso comenzaron a desprenderse por completo del cuerpo, para luego empezar a rodear a ambos jóvenes, no sabían que hacer y no tenían escapatoria, cuando de la nada, la navegante Nami apareció con su arma de combate y comenzó a golpear cada extremidad que se le cruzaba.

Sanji: ¿Creíste que te dejaríamos sola?- le pregunto con una sonrisa en el rostro.

Dicho esto, la tripulación de los sombreros de paja salieron de entre los arboles, al igual que Shanks y el joven capitán Morack, quienes tenían espadas en mano. Zoro comenzó a golpear cada extremidad, logrando abrir paso entre ellos y llegando a Shariza y a Stede.

Zoro: Señorita, ¿Se encuentra bien?- le pregunto.

Shariza: Si, gracias Zoro- le agradeció.

El peliverde observo al otro joven con algo de enojo y desconfianza, ya que el había sido el causante de que Buggy los encontrara y de haber sido quien traiciono a la tripulación de la joven pirata, antes esto, Shariza se pudo dar cuenta de la tensión que había de Zoro hacia Stede.

𝟏.|𝑶𝒏𝒆 𝑷𝒊𝒆𝒄𝒆: My Sails Are SetDonde viven las historias. Descúbrelo ahora