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—Ya estoy—. Sebastian llegaba hacia con Sergio, quien lo esperaba en la parte tracera del garage de Ferrari. Después de calmarse salió del lugar para desejar su mente por completo. Checo lo examinó de pies a cabeza. -Al final sí se dió una ducha-. Pensó ya que le llegó un leve olor al shampoo.
Vettel llevaba el pelo mojado y algo regado y Sergio trató de estirarse para peinarlo. Le faltaban un par de centímetros para alcanzarlo estando sentado. Sonrió al no alcanzarlo.
Sebastian solo soltó una pequeña risa y se agachó para que el mexicano lograra alcanzarlo, sería más fácil que Checo se levantara, pero aún así decidió agacharse.
Secudió los mechones rubios del alemán y después los peinó como pudo. Siempre hacía eso cuando miraba a Sebastian con el pelo algo húmedo, eso era ya algo rutinario.
Su atención se desvió hacia detrás de Vettel, dónde se encontró con la mirada de Räikkönen. Quien al parecer tambien había aprovechado para bañerse. La desvió al instrante, avergonzado al recordar cómo lo veía. —Oye—. Se dirigió a Vettel lo suficientemente fuerte para que Räikkönen también lo escuchara. —Kimi—, lo señaló y el nombrado observó a Sebastian con confusión, —tambien puede venir, la reservación era para tres—. Miró al finlandés unos segundos y bajó la mirada pensando en esa reservación. Tenía pensado ir con Carola y su suegra, ya que ella viajó junto con la pareja, sin embargo, en éstos momentos no quería toparse con ninguna de ellas. Si las veía les desearía mal, y hasta la muerte si era posible. Devolvió su mirara a Vettel, quien alternava su mirada confundida entre Räikkönen y Pérez. Sergio se aclaró la garganta con carraspeo. —Sí es que con quienes iría no podrán—. Trató de aclarar la situación, no quría que Sebatian sospechara que ya los había descubierto, que los vió en su "asunto". Era estúpido pensar que Seb sospecharía algo como eso, sin embargo, sentir la mirada del finlandés le ponía los nervios de punta.
—Bueno, es que Kimi tiene sus prácticas y—. No concluyó la frase, no creyó coerente concluirla. Räikkonen apenas comenzaría sus prácticas, así que él no podría asistir. Tenía trabajo.
Sergio dirigiendo una última mirada a Räikkönen. —Oh, lo siento no recordaba eso—. Se disculpó de su error, la incomodidad ya era bastante como para aumentarls con su imprudencia.
Kimi dirigió una mirada rápida el interior del garage. Deseoso de ir a comer a donde sea con Sergio, así quizás sería lograría disculparse. Pensando únicamente sobre el accidente que le provocó hace ya tres carrera, y olvidando el asunto de las regaderas. —No hay problema—. Se acercó hacia los otros dos. —Ya hablé con el jefe—.
Sebastian soltó una carcajada por las acciones de su compañero de equipo. Al parecer siempre sería así, con kimi haciendo lo que le plasca.
El piloto finlandés se hacercó tanto a Sergio, provocando un leve nervisosmo en éste, además de un casi imperseptible sonrojo al recorgar cómo lo miraba mientras hacía de Sebastian una miseria entre gemidos.
