jude bellingham?

noche tranquila

Después de disfrutar de la brisa fresca en la terraza, Ana sugiere que vayan a sentarse y charlar un poco más. Jude, con una sonrisa tierna, la sigue y la envuelve en sus brazos mientras se sientan juntos.

*Ana:* Entonces, ¿cómo estuvo el entrenamiento hoy con Vini y Camavinga? ¿Hicieron alguna travesura?

*Jude:* Oh, ya sabes, lo de siempre. Camavinga intentando hacer de las suyas y Vini tratando de mantenerlo bajo control. Pero en serio, ¿cómo estuvo el turismo en Italia? ¿Qué lugar te gustó más?

*Ana:* Bueno, ya sabes que Italia es hermosa, pero lo más divertido fue perderme por las calles estrechas de Roma y comerme un auténtico gelato italiano. ¡Ah, y la pizza! Nunca podré resistirme a una buena pizza italiana.

*Jude:* ¡Eso suena genial! Deberíamos planear un viaje juntos la próxima vez.

*Ana:* Definitivamente. Pero nada de reírte de mí si jugamos juntos a futbol en la playa ehhh

*Jude:* Jaja, lo prometo. Pero hablando de promesas, quiero que sepas que te quiero mucho, Ana. Gracias por todo lo que has hecho hoy. No hay nada tan bonito como esto, y eres mi persona favorita en el mundo.

*Ana:* Y yo a ti, Jude. También te he echado mucho de menos, y aprecio todo lo que has hecho por mí. Pero recuerda, después de todo lo que has dicho, tengo que idear algo aún más sorprendente para ti.

Después de su encantadora conversación, deciden retirarse a la cama juntos. Antes de dormir, Jude le pregunta con una sonrisa juguetona:

*Jude:* Mañana juego contra el Mallorca, ¿vendrás a verme, amor?

*Ana:* Por supuesto, ¿cómo me perdería el partido de mi futbolista favorito?

*Jude:* Perfecto, entonces marcaré un gol solo para ti mañana en el partido, ¿de acuerdo?

*Ana:* Encantada. A ver si hay suerte.

*Jude:* Claro, cariño. Y recuerda, sé que ves todos mis partidos, incluso sabes cuándo hay un fuera de juego.

*Ana:* Ay, cariño, ¡hasta me sé las reglas de memoria! Pero bueno, siempre me las explicas con tanta paciencia.

Narrador: Ana se acurruca junto a Jude y se quedan dormidos juntos en la habitación, listos para enfrentar el futuro juntos.