Cap. 26 - El mundo

26 1 0
                                        

-Mike (el original)-

Una mañana temprano me encontraba en el estudio haciendo unos arreglos a unas canciones que me habían encargado. Entonces mi teléfono comenzó a sonar frenéticamente.

Usualmente contestaba enseguida, pero en esta ocasión por alguna razón me distraje y no lo hice, sonaba una y otra vez.

Finalmente me acerqué para contestar, era mi pequeño 'yo'. Contesté. Sonaba muy alterado, traté de tranquilizarlo, me dijo que él y Chester habían tenido una discusión y que Chester se había ido del departamento.

-"¿Sobre qué discutieron?"- Le pregunté.

-"...solo discutimos, estoy preocupado porque no contesta mis llamadas, tampoco ha ido a la escuela ni el trabajo, a nadie le contesta."- Me dijo. Claramente no me quería decir la razón por la que habían tenido esa pelea, pero me imaginé que había sido alguna discusión de "pareja".

-"Okey, tranquilo. Intentaré comunicarme con él, en cuanto tenga noticias te llamo."- Le dije.

En cuanto colgué con él le marqué a Chester. Enseguida contestó mi llamada.

-"Bueno..."-

-"Hey, hola...¿como estás?"- Sentí un gran alivio de que hubiera tomado mi llamada.

-"Hola...estoy...bien."- Me contestó con duda. Al parecer no quería decirme la verdad de como se sentía, así que decidí no presionarlo.

-"Me alegro, ya tengo tiempo que no los visito, estaba pensando en ir a verlos en estos días."-

-"Mike, yo...la verdad...es que ya no me estoy quedando en el departamento."-

-"¿Por qué? ¿Pasó algo?"-

-"Sí...pero no quisiera hablar de eso por teléfono."-

Cuando menos ya había admitido que algo había pasado.

-"Está bien, no te preocupes. Voy para allá. En cuanto llegue te llamo."-

Tomé el primer vuelo que encontré y fui de inmediato a verlos.

Llegué primero con mi "réplica".

Me saludó y abrazo gentilmente como siempre. Ahora ambos eran igual de altos que yo y el Chester original, no, de hecho eran un poco más altos.

Nos sentamos en la sala y comenzamos a platicar.

-"¿Qué fue lo que pasó?"- Le pregunté.

Hiso una pausa.

-"Hay algo que no les hemos dicho."- Me dijo, parecía algo apenado.

-"¿Que es?"-

-"Chester y yo...somos pareja desde hace casi dos años"-

No dije ninguna palabra, siempre supe que tarde o temprano terminarían juntos, así que solo esperé paciente a que continuara.

-"¿No te sorprende?"- Me cuestionó al ver que no reaccioné ante su confesión.

-"Ah...claro...emmm..¡huouh!..."- Hice un gesto demasiado actuado. Rio de inmediato, yo también reí.

Desde que nos conocimos desarrollamos una relación muy agradable. Yo no lo veía como otro "yo" pues realmente era una persona totalmente distinta a mí, el tenía su historia de vida que lo hacía único. Lo consideraba como un hermano menor y él también me veía a mí como su hermano mayor con quien podía hablar de cualquier cosa con suma confianza.

Después se volvió a poner serio.

-"...Daría el mundo por él, ¿sabes?"- Dijo pensativo.

Lo entendía por completo, yo había sentido lo mismo por el Chester original.

-"Pero antes de conocerlo salí con un par de personas. Con ellas llegué a un punto al que aún no he llegado con él. Se enteró de eso y ahora piensa que lo dejaré de amar si también llegamos a ese punto."-

Ahora entendía todo.

Siendo padre desarrollé esa habilidad de cuidar a mis hijos de cualquier peligro. Incluso de cuestiones del corazón me mantenía, aunque al margen, al pendiente de que no se hicieran más daño del necesario mientras recorrían su propio camino en ese tema tan indispensable pero que puede ser bastante complejo a la vez.

Fue por eso que no pude evitar estar al pendiente sin que ellos lo notaran, de cómo se trataban el uno al otro, y siempre pude ver que había un gran cariño, amor y respeto por parte de ambos en su relación.  Así que nunca me preocupe y tampoco estaba preocupado ahora, sabía que estaban haciendo las cosas bien.

Por lo visto mi pequeño 'yo' había tenido algunas experiencias previas que la réplica de Chester no. Y podía entender a la perfección lo que el pequeño Chester debía estar sintiendo.

-"Ya veo...intentaré hablar con él."- Le dije tranquilamente para reconfortarlo.

-"En verdad te lo agradezco."- Me contestó.

Ambos nos levantamos y nos despedimos con un abrazo. De verdad estos niños habían crecido mucho, ahora era yo quien se veía pequeño junto a ellos.

El día de mañana iría a buscar al pequeño Chester.

-Continúa-

RéplicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora