CAPÍTULO XXIV "NUEVO CONTRATO"

35 5 0
                                    

El edificio Vanity es de los más hermosos que se encuentra en Washington, por ello, cuando se presentó la oportunidad de modelar para esta compañía, no pude negarme, no es tampoco como que me lo hubiesen permitido

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El edificio Vanity es de los más hermosos que se encuentra en Washington, por ello, cuando se presentó la oportunidad de modelar para esta compañía, no pude negarme, no es tampoco como que me lo hubiesen permitido.

Estaba justo hoy muy de malas como para conocer a los ejecutivos, aparte de que mi ídola y creadora de los productos Vanity, Vanessa Hessler no estará presente dado que su sexy agente de seguridad resultó herido en el ataque en la semana de la moda en Nueva York, no pude saludarla por ello, lo que me tiene de malas.

-Subiremos en el siguiente ascensor, no hagas nada estupido, Kathleen.

-Deja de darme órdenes, Ashton.

Abordé el ascensor, no entiendo por qué no subió si solo estamos dos personas aquí, no es como que el sujeto de mi diestra ocupe tanto espacio, la silla de ruedas es de las decentes.

-Maldita sea, esto es Vanity Cosmetics, no un centro comercial ¿Acaso no necesitan más ascensores? Es la hora de ingreso al trabajo, carajo ¿Qué esperan los directivos que hagamos? ¿Usar las escaleras? Ojalá ellos las usaran.

El sujeto a mi lado, un castaño ardiente por cierto, me miró de reojo sin referir nada.

-Debería haber un ascensor exclusivo para personas con discapacidad ¿No lo crees? Pero qué CEO tan desconsiderado, por Dios.

Siguió mirándome fijamente sin referir nada.

-No tengo problema con usar los ascensores que usa todo el mundo.

-Claro, dices eso porque debes ser muy bueno en tu trabajo y te gusta este lugar, pero te aseguro que esos sujetos de cuello blanco de la alta gerencia sí que tienen un ascensor especial y exclusivo para sus caros y refinados traseros.

Tragó saliva, miré los pisos que subíamos.

-Me gusta el color que usas hoy, va contigo, sabes de moda ¿Ah?

-Un poco.

-No seas humilde, vistes como un ejecutivo, deberías ser tú, seguro ellos son viejos y rabosverdes como toda la gente para la que he trabajado, los odio, en serio, solo quieren tocar mis pechos o mi trasero.

-No creo que el CEO de Vanity quiera hacer eso.

-¿Lo conoces?

-Sí.

-¿Es joven? ¿Agradable? ¿Mandón? ¿Gritón? ¿Pervertido?

-Es buena persona.

-Mi representante dijo que es estricto, ególatra y muy berrinchudo.

Elevó una ceja.

-No lo creo.

-¿Te agrada tu jefe? Solo mira, te hace usar un ascensor en donde suben todos, seguramente te golpean o es cansado para ti, ah, maldito y yo aquí procurando que gane mucho más dinero del que ya tiene, ya me parece detestable.

"𝑰 𝑾𝒂𝒏𝒏𝒂 𝑹𝒖𝒏 𝑻𝒐 𝒀𝒐𝒖"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora