#22 + DÉJÀ VU Y UN CERVATILLO +

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#22 + DÉJÀ VU Y UN CERVATILLO +







—Por favor que sea negativo, por favor Dios que sea negativo —junto mis manos en mi pecho y cierro los ojos como si alguien me pudiera escuchar y cumplir mi deseo.

Cuando la alarma suena anunciando que los 5 minutos han pasado abro los ojos al instante, apago la alarma y me levanto del suelo. Observo mis manos temblorosas y al tomar aquella prueba cierro los ojos y al tenerla frente a mí los abro lentamente.

—Que sea negativa —repito por última vez.

Al chocar mi mirada con aquel par de rayitas la prueba se me cae de las manos y siento como mi cuerpo comienza a temblar como una gelatina.

—No, esto no puede ser. Debe ser un error, un completo error.

Tomo las otras dos pruebas más que se encuentran en el estante de mi baño y el resultado es el mismo, dos rayas; un...

—Estoy embarazada.

Siento como el mundo se me viene encima, mi mente deja pensar y mi cuerpo se desploma en el baño. No hay ningún pensamiento, me encuentro en estado de shock y no se cuánto tiempo pasó así, solo sé que salgo del baño hasta que mi mamá llega a tocarme la puerta para ir a cenar.

Al día siempre mis nervios siguen de punta, lo único que deseo es verlo en la escuela y contarle lo que está pasando; sé que él tendrá la solución y también sé que jamás me dejaría sola porqué al igual que yo lo amo, el también me ama y haría cualquier cosa por mí.

Recorro los pasillos de prepa y no logro verlo por ningún lado, eso me pone más mal de lo que ya estoy, pero al llegar a la entrada de la cafetería lo veo abrazado de Rocío y dándose un beso en los labios.

—¿Qué?...

Trato de asimilar lo que está pasando pero la rabia me invade por completo, quisiera ir y golpearlos a ambos hasta que no quedara nada de los pero no lo hago.
Se separan después de un largo beso, nuestras miradas se cruzan y al mismo tiempo la sonrisa que tenía en el rostro se le borra.

—¿Ustedes...? —los señaló a ambos y Rocío sonríe.

—Estamos saliendo Bambi, oficialmente hoy somos novios después de divertirnos por un largo tiempo. Él al fin me pidió que sea su novia.

—¿Su novia? —sigo sorprendida— ¿Rocío es tu novia?

—Si Bambi, Rocío al fin es mi novia.

No sé porque su respuesta se siente como si me arrojarán al vacío de un precipicio, como si recibiera una puñalada en el corazón y estuviera muriendo lentamente por la persona que más me importaba en la vida. Todo comenzaba a doler y esa noticia era la peor que me pudieran dar en este momento en que tanto lo necesitaba.

—¿Que pasa amiga no estás contenta por nosotros? ¿Acaso no nos vas a felicitar? —una sonrisa burlona se dibujó en su rostro, era como si ella supiera lo que pasaba entre nosotros.

—Felicidades a ambos, hacen una hermosa pareja y hablando de parejas tengo que ir a buscar a Reno ya que tenemos que hablar de algunas cosas.

No le di tiempo de responder y me aleje de ellos, tenía unas inmensas ganas de llorar que si no me hubiera ido habría acabado llorando frente a ellos.
Iba a doblar la esquina cuando sentí que alguien me tomó del brazo y me obligó a entrar a uno de los salones.

100 Días para enamorarloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora