100 Días para enamorarlo

#24 + UNA NUEVA OPORTUNIDAD PARA VIVIR +

#24 + UNA NUEVA OPORTUNIDAD PARA VIVIR +

—Luz, Luz por favor vuelve, vuelve Luz.

La llamé una y otra vez pero ella nunca apareció, era como si se hubiera extinguido y ya no existiera. La extrañaba demasiado, ella seguramente tendría la respuesta correcta que tanto añoraba ya que mi vida era una completa mentira.

Los odiaba, odiaba a mis padres y una les perdonaría la falsedad en la que estábamos viviendo; ambos me mintieron, me hicieron creer que mamá era inocente y era todo lo contrario. Cómo pudo aguantar ella tantas mentiras, como mi padre pudo burlarse de ella tantas veces.

Mi vida era un asco y nada cambiaría las cosas, nada. Continué llorando, hacía horas que había escapado de casa y aún no quería regresar, quería olvidar las cosas que estaban pasando y solo quedarme llorando hasta que no hubiera ninguna lágrima en mis ojos. Mi petición se vio interrumpida por el rechinido de la puerta al ser abierta, me puse en alerta porque nadie conocía mi escondite secreto en el que solía venir cuando me sentía triste desde que era una niña.

—¿Quien anda ahí? —pregunte temerosa.

No hubo respuesta avance otro lado hacia el pasillo de la puerta y entonces sentí como alguien se abalanzó sobre mi y me abrazó demasiado fuerte.

—Bambi al fin te encuentro, te busqué por todos lados y no sabes lo preocupado que estaba ¿Estás bien? —se alejó de mi y me inspeccionó de pies a cabeza.

—¿Reno que haces aquí? —no entendía que hacia él aquí y porque me buscaba.

—He estado preocupado desde que te atacaron en la preparatoria, no pude verte y entonces me armé de valor y fuí a buscarte a tu casa entonces tus padres me contaron que discutieron y hacia horas que no regresabas a casa. Ellos me pidieron ayuda y hace horas que te estoy buscando.

—¿Ellos te pidieron ayuda?...

Me parecía imposible que mis padres me buscarán, seguramente trataba de silenciarme para que no hiciera una locura y terminara con su "familia perfecta".

—Se me acababan los lugares para buscarte y entonces me acordé de este lugar, es donde solías venir siempre que te sentías triste y no me equivoqué. Sabías que estarías aquí.

—Reno... —traté de alejarlo de mi pero él negó con la cabeza.

—Voy a quedarme callado como siempre solía hacerlo; puedes llorar, gritar, incluso golpearme para sacar tu enojo pero no pidas que te dejé porque no lo voy a hacer ok.

Sus palabras solo lograron que yo llorara mucho más, como él podía ser siendo bueno conmigo después de todo lo que le había hecho.

—Terminé con Lenka, cometí un error al empezar a salir con ella y ahora lo sé porque yo jamás deje de... —antes de que dijera esa palabra lo interrumpí.

—Fuí amante de tu padre y lo hice porque tú hermana se metió con mi padre, eso nunca se lo perdone y por eso me hice su amante. ¿Ahora me sigues viendo con los mismos ojos? —sabía que después de mi confesión él se iría pero no lo hizo y solo se sentó en el suelo.

—Lo sé, el día de mi accidente me lo dijistes y no solo eso. Yo lo sabía de antes y créeme que ya no soy una víctima Bambi, ya no me veas de esa manera porque solo me hace sentir mal.

—Reno

Reno me señaló que me sentará a su lado y eso hice, no sabía a dónde nos llevaría está conversación pero ambos lo necesitábamos.

—Lo siento Bambi, siento que Rocío arruinara tu vida al igual que yo en verdad lo siento.

—Reno yo debería disculparme por lo que te hice y no al revés.