El sol se había puesto, pero cierta chica larguirucha de cabello negro aún no había aparecido y Roseanne estaba cada vez más ansiosa.
El pastel en el horno se había enfriado hacía mucho tiempo, al igual que la tetera que había preparado junto con los mejores cubiertos que tenía. Incluso había barrido un poco y preparado un jarrón para las flores que supuestamente llevaría Lisa.
Pero incluso si no hubiera encontrado ninguna, a Roseanne no le habría importado tanto. Ver a Lisa nuevamente después de lo que parecieron días (cuando en realidad fueron solo horas) sería suficiente.
Incluso había pasado una buena media hora en su tocador, debatiendo cómo peinarse y decidiendo qué vestido ponerse, con la anticipación haciendo que sus mejillas se sonrojaran mientras bailaba en medio de su habitación con el vestido elegido, fingiendo que era Lisa en el Festival.
Todavía temblaba de anhelo ante el recuerdo, recordando cómo se sentía ser sostenida por Lisa, sus manos rozando sus caderas, su aliento besando su oído mientras los latidos de sus corazones caían al ritmo del otro.
Roseanne no se había sentido como ella misma en mucho tiempo, pero con la llegada de Lisa, todo parecía estar en el lugar que le correspondía.
Y Roseanne podría incluso decir tentativamente que estaba feliz: feliz de tener una nueva amiga, feliz de saber que era una chica amable y de buen corazón que era buena con los animales y se ponía adorablemente nerviosa, feliz de que Lisa parecía igualmente afectada por ella tanto como ella se veía afectada por la propia Lisa.
No pudo evitar recordar la noche anterior cuando Lisa, sin saberlo, la acunó cerca de ella mientras dormía, su mano acariciando su columna que enviaba chispas por todo el cuerpo de Roseanne, pero al mismo tiempo la hacía sentir tan tranquila, segura y cuidada, por eso se quedó dormida al instante, soñando con la felicidad doméstica en los brazos de Lisa.
Cuando escuchó a Lisa moviéndose más tarde después de descubrir su precaria posición, solo pudo sonreír para sí misma, adivinando lo nerviosa que debía haber estado Lisa.
Pero la chica que anhelaba ver no estaba a la vista en este momento y la preocupación de Roseanne aumentó.
¿Podría Lisa haber sido asaltada? ¿Quizás tenía algún recado de última hora? ¿Quizás estaba cansada y se olvidó y se fue a casa? ¿Estaba todavía en Snowdrop?
No había forma de ver dónde estaba Lisa a menos que fuera físicamente a comprobarlo ella misma. Estaba oscureciendo cuando tomó su abrigo y abrió la puerta, siseando agudamente ante la ráfaga de frío que la recibió.
Primero iría a Snowdrop y averiguaría el paradero de Lisa. Con suerte, no le habría pasado nada, aunque una voz astuta en la parte posterior de su cabeza seguía susurrando cosas cada vez peores que podrían haberle sucedido a Lisa.
Rosie no podía sentarse y esperar más tiempo o perdería la cabeza. Tenía que hacer algo, seguir moviéndose y mantenerse distraída hasta asegurarse de que Lisa estaba a salvo e ilesa.
Preferiblemente en sus brazos, también.
Mordiéndose el labio, Roseanne finalmente tomó una decisión mientras sacaba la llave especial que colgaba del cuello de Honey de su bolsillo y la apretaba con fuerza en su mano.
"Vamos."
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Cerradura & Llave (Traducción)
FanficLa mujer más deseada de la ciudad ha anunciado que solo se casará con quien pueda abrir la puerta de su casa con la llave alrededor del cuello de su gato. Un Chaelisa AU con una pizca de Jensoo. {Una historia de colaboración con StanThinMints en wat...