Que pensarías si justo cuando puedes tener un día de lo mas normal...en plena pandemia...terminas muriendo así como si nada? Mal, por su puesto.
Sin Embargo....y si te otorgaran una nueva oportunidad de vivir, pero en otro mundo, es decir, una...
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Se puede ver como cierto asesino de anteojos está corriendo desesperadamente, llendo en punto fijo y sin la necesidad de mirar hacia atrás.
Green: (Oh mierda, oh carajo, oh joder, si no me apuro, me alcanzará y será mi fin) - se dijo el chico aumentando la velocidad.
El pelinegro sabia muy bien que no tendría ningun chance contra los asesinos oarburgh, eso y sumado que su shingu seria pesima para luchar en las circunstancias de las que está escapando, por lo que no le quedaba mas que huir y pedir ayuda del resto de sus hermanos de armas.
Green: (Mierda, como desearía que las cosas fuesen distintas...) - dijo mentalmente a la vez que seguia corriendo.
Momentos mas adelante, llegó a un lugar a salvo, encontrandose a Akame sola, preocupada por el, mientras que este mismo la calmaba y aseguraba que nada malo le pasaría.
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En eso, ambos se quedaron mirandose mutuamente, poco a poco sus rostros se iban acercando, cosa que los labios de ambos. Estando a nada de un beso...finalmente, lo habia conseguido.
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*CHU*
Ambos empezaron a besarse como nunca antes, como si ambos hubiesen esperado ese momento en lo mas profundo de su ser, el pelinegro puso sus manos en la espalda de la pelinegra para sostenerse mientras que la ojirroja puso sus manos detrás del cuello del chico de anteojos. El momento de brillar de Green habia llegado después de tanto tiempo de sufrimiento y desarrollo...ahora solo le quedaba disfrutar de este momento y luego celebrarlo a lo grande...
