𝐅𝐔𝐄𝐆𝐎 𝐂𝐑𝐔𝐙𝐀𝐃𝐎━━━━𝐈𝐧𝐚𝐳𝐮𝐦𝐚 𝐞𝐥𝐞𝐯𝐞𝐧²

Capítulo 45

Cuando volví hacia el banquillo, todas las miradas se dirigieron a mi.

Me asustó recibir tanta atención sin haber pronunciando palabra, así que pregunté—¿Qué?

—¿Alessia De Angelis es tu madre?—Preguntó Mark con una cautela impropia de él.

—Biológicamente, sí—. Afirmé.

Nadie sabía sobre eso más que Jude, ni siquiera Axel.

—¿Por qué no nos lo dijiste el día que nos ayudó a salir de casa de Zoolan?—. Preguntó Thor.

—Son asuntos privados—. Intervino Travis, y lo agradecí—. En cinco minutos empieza el segundo tiempo, id preparándoos.

Todos volvieron a volcar su atención en sus cosas y Jude se acercó a mi.

—¿Como lo saben?—Pregunté.

—Al detective Smith se le escapó—. Informó—. Al parecer Robingo estaba bajo un programa de refuerzo humano, casi como la piedra Alius, cada vez que sonaba el silbato, se activaba.

—Joder—. Fue lo único que alcancé a decir antes de que Silvia nos llamase.

—Parece que la operación de Hillman es más complicada de lo previsto, todavía sigue en el quirófano.

—Hillman está teniendo su propio duelo, así que tenemos que ser como él y no darnos por vencidos. Venga chicos, ¡vamos a ganar este partido!

—¡Sí!

(...)

El partido se remontó y ganamos 3-2, a los jugadores de Brasil les había costado meterse en el juego, pero consiguieron hacerlo.

Robingo incluso se puso a bailar samba con la pelota entre sus pies. Me había costado mucho superarle, pero lo conseguí.

Estábamos oficialmente en la final.

Mi hermano me abrazó despertándome del ensimismamiento en el que estaba.

—De verdad hemos pasado a la final—. Murmuré.

—¡La operación de Hillman ha sido un éxito!

—¿¡Lo has oído!?—Me emocioné.

Nos acercamos al grupo y celebramos juntos tanto el pase a la final como la exitosa operación de Hillman.

(...)

Nos montamos al bus del equipo al que se habían unido Sue y Tori, que nos estaban apoyando desde las gradas.

El ambiente era muy animado, manteníamos una conversación grupal y las risas eran lo que más se oía.

Abrí mi móvil y leí el mensaje de Paolo: "Felicidades por el pase a la final rubia, te quiero"

Sonreí a la pantalla y tecleé un agradecimiento, le deseé suerte para su partido de mañana que decidiría si nos enfrentaríamos a Orfeo en la final.

Llegamos al Albergue y subí mi bolsa con la toalla mojada y el champú que había utilizado en las duchas del estadio a mi habitación.