3- esperanza

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Al cruzar la puerta me deslumbro la luz, tanto tiempo en la obscuridad me hizo olvidar lo brillante que era el exterior, lo primero que ví, fueron unas escaleras que daban a la planta alta, subí lo más rápido que pude, me tropecé unas cuantas veces las piernas no me dejaban de temblar, no sé exactamente cuánto tiempo estube encerrado pero fue lo suficiente para que perdiera la fuerza en mis extremidades por estar tanto tiempo sin hacer esfuerzo alguno, antes de subir el último escalón, Escuché unas carcajadas provenientes de la prisión donde antes estaba, seguido de unos golpes muy fuertes, me quedé helado cuando lo escuche, estaba tratando de romper la cadena, no habían pasado ni 5 minutos y ya estaba fuera de la influencia de mi voz,

-ENSERIO CREES QUE VAS A ESCAPAR DE MI ?, CUANDO TE ATRAPE  VOY A QUEBRAR TUS MANOS Y PIERNAS TE LAS ARRANCARE, ME ESCUCHAS ETHANNNN - se escucharon más golpes, la cadena se escuchaba chirriar, no era posible que un hombre pudiera romper el metal verdad?
Era imposible, no me detuve más tiempo para averiguarlo, subí el último escalón, y lo que ví me dejó perplejo, una casa, era una maldita casa, yo estaba en un sótano, siempre creí que estaba en algún almacén abandonado o una bodega, pero estaba atrapado en el sótano de una casa, era una de esas casas modernas, minimalista con una paleta de color negro, blanco y gris, todo impecable sin una sola mota de polvo, empecé a correr buscando la salida, justo al salir del sótano estaba la sala, y a un lado una gran ventana que dejaba ver un hermoso jardín y una calle a lo lejos, ví la puerta al final de la sala y cosina, , corrí con el corazón sonando a todo volumen en mis oídos, no podía creerlo estaba a unos cuantos pasos de mi libertad, para cuando él se libera de las cadenas yo estaría del otro lado de la ciudad, si es que podía liberarse, mi corazón se llenó de esperanza, una que hace tiempo no sentía

Tome el pomo entre mis manos, las lágrimas de felicidad caían sobre mis mejillas, estaba tan eufórico, entonces lo gire .

Nada, no abría,  estaba cerrado, a un lado había un panel electrónico para ingresar una clave, y un cerrrojo para abrir la puerta, saque la llave de mi bolsillo, pero solo era una, la del grillete, el tenía las de la casa, no iba a bajar de nuevo con ese monstruo para conseguirlas, tenia que aver otra opción.

Ya no podría utilizar mi voz con el, tenía un límite, rara vez podía usarla, y cuando lo hacía consumía demasiada energía, no podía volver y utilizarla para darle una orden, si lo hacía estaba seguro que caería desmayado, incluso ahora me sentía demaciado agotado, mire a todas direcciones, inspeccionado la casa para encontrar algo que fuera útil algo que me ayudara a escapar, estaba abrumado la desesperación de querer huir y no poder hacerlo estando tan cerca y lejos a la vez , me estaba matando
Entonces recordé, la ventana de la sala, corrí de regreso, tome una de las sillas del comedor, me pare frente la ventana, tome un respiro, agarre la silla por una de sus patas traceras  la avente en dirección del cristal, me cubrí los ojos, para no lastimarme con los cristales que salieron volando, casi podia sentir el viento en mi rostro, baje el brazo que cubría mi cara,

La sangre bajo hasta mis pies, esa sensación que tienes cuando algo te asusta demaciado, sientes que tú alma abandona tu cuerpo y va directo de tus pies al suelo, la boca se te seca y sientes que tú rostro está completamente pálido, así me sentí en el momento que ví la ventana

-YA TE DISTE CUENTA ETHAN, NO HAY SALIDA NO PUEDES ALEJARTE DE MI TE DIJE QUE CORRIERAS PERO CREO QUE ME EQUIVOQUÉ LO MEJOR SERA QUE TE ESCONDAS- su voz sonó a lo lejos estaba en un trance, la imagen que tenía enfrente mío lo consumió todo, consumió mi esperanza, mi fuerza, la chispa que tenía en mi interior de poder huir murió en el momento que ví, como al rompece los cristales dejaban ver una pared de hormigón, el hermoso jardín con  prado y la calle a lo lejos,que había visto a través de la ventana solo era un holograma, creado por una pantalla, solo una ilusión de mi libertad, no había nada detrás más que una fria pared,
Corri por toda la casa en busca de otras ventanas con desesperación,  rompí cada una de ellas pero todas eran falsas el mismo frío hormigón se asomaba en cada una que rompía, en total fueron 4, cuatro veces que tuve esperanza y 4 veces la esperanza moria con cada vidrio roto,

Con Sangre Donde viven las historias. Descúbrelo ahora