Capítulo 15

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Alena Landam

Hace calor.

Mi cuerpo suda y mi respiración es pesada, ella me toma del mentón lamiendo mis labios, deja mordiscos en mi mandíbula que me hacen gemir de nuevo, cuando abro los ojos la veo ahí, sonriendo y volviendo a besarme, amo los besos de Atenea.

Hay algo húmedo en mi vientre también, está erizándome y hacerme sentir muy húmeda, cuando Atenea deja mis labios para atender mis pechos con su boca es que consigo una imagen más clara, miro hacia abajo donde mis dedos están enredados entre los rizos de Yanina, ella acaricia mis piernas, mordisquea alrededor de mi ombligo.

No hay ningún tipo de pensamiento en mi cabeza más que el placer que estoy recibiendo, la lengua de Atenea rodeando mis pezones y las manos de Yanina abriendo mis piernas.

Mis gemidos que no son capaz de pronunciar el nombre de ninguna de las dos porque quiero que continúen sin sentirse menospreciadas, cambian sus posiciones, Yanina sube los besos hasta mis pechos, toma uno entre su boca y Atenea automáticamente comienza a descender, se coloca entre mis piernas, grito en cuanto su lengua me toca, la ayudo hundiendo más su rostro entre mis piernas, Yanina me besa, la lengua de Atenea hace que mis gemidos y quejidos terminen sobre los labios de Yanina.

Es tan bueno que no puedo con ello y al mismo tiempo no quiero que acabe.

Yanina, Atenea. Atenea, Yanina.

"Elígeme"

La lengua de Atenea es reemplazada por la de Yanina, ahora es ella quien se encarga de mi humedad. Atenea quien sólo tenía su pequeña braga puesta se deshace de ella, la veo posicionarse sobre mí, arrastrándose hacia arriba, justo frente a mi cara, me sujeto de sus piernas flexionadas y tiro de ella hacia abajo, la exploro con mi lengua, los gemidos de Atenea se hacen presentes, Yanina entra en mi con dos dedos y me desconcentra un poco de mi labor, mientras más rápido entra y sale de mi más quiero comerme a Atenea.

"Elígeme"

El molesto sonido es cada vez más fuerte y termina por hacerme despertar por completo. Realmente estoy sudando y mi piel se siente caliente, ¿que clase de sueño fue ese?

Dios, esto no puede ser bueno, no puedo estar realmente teniendo sueños como ese, ni siquiera he besado a Yanina y en mis sueños la he visto desnuda, y el cuerpo de Atenea, ese lo conozco de sobra, mi memoria aún es buena, aún puedo recordar cada detalle.

¿Qué estoy haciendo?

__ Llegamos un poco tarde hoy, ¿no? __ Yanina es la primera de las dos con la que me encuentro, Atenea hoy ha tenido que salir muy temprano, tenía cosas que atender en la empresa así que ni siquiera pude saludarla y que bueno porque estoy segura que ella si hubiese podido leer mis pensamientos, sobre todo hoy que me siento tímida y sonrojada, si ellas supiera lo que soñé esta noche. Joder, mi mente es muy sucia __ ¿dormiste bien?

__ Sí.

__ ¿Tuviste sueños buenos? __ desvío la mirada, no se como clasificar mi sueño, quizás fue bueno. Fue muy bueno, pero es tan vergonzoso __ ¿por qué estas tan roja?

__ ¿Tu tuviste sueños buenos?

__ Todos mis sueños son buenos porque estás en ellos __ acomoda mi cabello, me pregunto que pasaba por mi cabeza el día que decidí obedecer a Atenea en proponerle a Yanina este juego de tres. Las dos actúan como si nada, siguen viéndome, me dan regalos, me hacen cumplidos y fingen que la otra no existe.

Estoy en este conflicto con dos mujeres maravillosas, al principio quería estar con Yanina, creí que podría conseguir hacerla feliz a cambio de la calma que me proporcionaba, le di a Atenea la oportunidad de irse y de olvidarse de todo, de mí, de nosotras. Creí firmemente que sería lo más sano.

Las tres "L" básicas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora