Capítulo 8

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Alena Landam:

__ Buenos días __ Atenea me espera en la cocina, en sus manos tiene dos tazas de café y me ofrece una, ella siempre termina levantándose antes que yo, supongo que verse así de bien toma su tiempo.

__ ¿Dejaste los vestidos?

__ Hay mucha tierra y pasto, me cuesta por las zapatillas, pero sabes que no tengo ropa casual así que mi salvación son los trajes.

Trajes que son mi perdición, estos días las cosas han estado más tranquilas, al menos ya puedo verla y hablar con ella sin sentir que quiero subirla a un avión y enviarla de regreso por donde llego. Ella también ha estado cumpliendo con su palabra, ni siquiera me habla de volver o de sentimientos, simplemente se limita a escucharme y ayudarme a cuidar de señor Pambazo.

Señor Pambazo es otro traidor, cuando yo quiero abrazarlo lloriquea y sale corriendo, pero cuando se trata de Atenea se la pasa restregándose en ella, necesitado de amor.

__ ¿Cómo van las clases de inglés?

__ Los chicos son más listos de lo que Nina cree __ Esa es otra cosa que he notado. Atenea siempre se refiere a la directora con ese apodo, ellas ni siquiera son amigas, ni tienen una relación cercana, pero son amables la una con la otra.

__ Arturo te mira mucho.

__ Arturo es un buen chico, es muy listo también y es el que mejor domina el idioma, sus compañeros son envidiosos, pero esta bien, es algo que siempre nos sucede a los que brillamos más que los demás sin intentarlo.

__ Que modesta __ Me quejo, ella sonríe.

Sonríe más a menudo desde que somos amigas.

__ Que tengas un buen día de trabajo hoy, Atenea.

__ Lo mismo para ti.

Los besos esquimales también son frecuentes, ella me toma del rostro y acaricia nuestras narices, luego acomoda mi cabello y me deja salir del auto.

Llegamos juntas, pero siempre soy la primera en entrar, ella me deja en la puerta, y luego Atenea y Max van hasta el estacionamiento, Atenea entra por la puerta trasera y Max se queda en el auto.

O eso es lo que Atenea cree porque yo lo he visto escapar en varias oportunidades.

__ Siempre eres tan puntual __ me topo con Yanina en el reloj checador, ella esta hablando con su secretaria, pero en cuanto nota mi presencia levanta la vista y se dirige hacia mí.

__ Me gusta dar buena impresión.

__ Yo ya estoy más que impresionada __ ella se acerca por detrás, siento sus manos en mi cintura y un beso en mi mejilla __ buenos días, profesora Alena, se ve más hermosa que la mañana.

Luego camina hacia su oficina y se despide de mi con la mano, suspiro, no sé cuanto tiempo podre seguir viviendo así, las dos me ponen nerviosa a su manera.

Dando clases casi nunca puedo ver a Yanina, ella siempre se la pasa en su oficina o en la construcción del comedor en la que mi tío Ediel trabaja, ella parece muy entusiasmada con ese proyecto, es uno muy bueno, los chicos merecen toda la ayuda que se les pueda brindar, y el donador anónimo, ese tipo debe tener mucho dinero, pero también debe tener un muy buen corazón.

__ Nos encontramos de nuevo, profesora Alena, que casualidad __ Atenea esta en la sala de maestros, con las piernas cruzadas y un pequeño tupper frente a ella, mastica con tranquilidad.

__ Que chiquita es la escuela.

__ Realmente lo es, ¡Oye! __ golpea con suavidad mi mano cuando intento robar un poco de su desayuno __ yo puedo darte mi vida si quieres, pero mi comida no.

Las tres "L" básicas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora