Chispas en la oficina..., ¡fuego en el dormitorio!!!
El ex modelo Thailandes Nattawin por fin había encontrado su lugar en Sterling Enterprises, la empresa inmobiliaria de su difunto exmarido. El problema era que Mile Romsaithong, el arquitecto con...
-Oh!!. Vale. !! -Nattawin se separó de él-. Supongo que podríamos hablar de ello ahora...
-Mi situación es complicada. Por eso luché contra mi atracción por ti. No puedo involucrarme con nadie. Mi hija es mi prioridad. Ella ha pasado por mucho.
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Nattawin se acercó al tocador y agarró una toalla, envolviéndose el cuerpo con ella.
-Por supuesto. Lo comprendo Mile.
¿Lo comprendía de verdad? El no conocía prácticamente nada de su pasado, y él pretendía que siguiera siendo así.
-Y luego está el trabajo. Tú y yo sabemos cómo son los rumores en esa oficina. Si alguien se entera de esto, será de lo único que hablen.
Nattawin no esperaba tener una conversación así después de lo vivido la noche anterior, se sentía devastado, pero se forzó a sonreír.
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-No te lo tomes todo tan en serio, Mile. Solo ha sido un poco de sexo entre amigos.
-¿Estás seguro? -Su expresión no parecía decir lo mismo que sus palabras.
-Sí. Te preocupas demasiado Mile no pasa nada ya entendi. -Le dio una palmada en el hombro-. Me ducharé en mi propio baño.
Mile tragó saliva, dándose cuenta de que tal vez había metido la pata hasta el fondo.
-¿Estarás listo en una hora?
-Sin problemas. -nattawin asintió y se dirigió a la puerta.
-¿Quieres que llame al servicio de habitaciones y pida café? ¿Tal vez algunos pasteles? -Era tan patético tratando de complacerlo con dulces...
-Gracias, pero no tengo hambre. -Y después Nattawin desapareció.
Mile suspiró y entró en su cuarto de baño. ¿Cómo había podido salir todo tan mal? La noche anterior había estado en la cima del mundo. Y no solo por el premio. Nattawin le había hecho sentirse vivo de nuevo.
Pero sus necesidades y deseos no eran lo más importante. Era una cuestión de prioridades. Nattawin y él tenían trabajo que hacer juntos. Y Mile tenía una hija que proteger.
