La Alta Socieda

Capitulo #18

--Hola Sandy como estas?..

-Estoy bien. Muy bien. Aquella mañana que nos vimos en la pastelería me dijiste que podía llamarte.

-Claro. Por supuesto. ¿Estás buscando trabajo? No he tenido tiempo de ver si hay algún puesto disponible ahora, pero lo haré encantado y seguro que encontramos algo para ti. Yo te sugeriría programar una
reunión con el señor Singleton para aclarar los motivos de tu marcha de la empresa.

-En realidad no necesito un trabajo. Tengo uno nuevo y es estupendo. Estoy trabajando en la oficina de urbanismo del Ayuntamiento. Por eso te llamo.

Nattawin no se lo esperaba y se preguntó por qué querría Sandy contárselo a ella. Tal vez solo estaba siendo paranoico.

-Oh, vaya...

-Me siento mal por la forma en que os dejé tirados la última vez.

Así que quería haceros saber que, si necesitáis algo de mí, no dudéis en pedírmelo. Estaré aquí para responder a cualquier pregunta o dar detalles Sobre cualquier aspecto del proceso de selección a medida que avancemos
en la segunda fase de licitación del proyecto.

-Fantástico. -Realmente era una gran noticia. El otro contacto de Nattawin en el Ayuntamiento era terrible.

Rara vez devolvía las llamadas y, si lo hacía, siempre era días después. El ofrecimiento de Sandy podría ser una
gran ayuda-. ¿Me puedes dar tu línea directa?

-Puedes llamarme directamente a mi móvil. Es este mismo con el que te estoy llamando. Nuestro sistema telefónico en el Ayuntamiento es una pesadilla, y así podrás localizarme cuando me necesites. Incluso los
fines de semana. -Sandy dudó un momento-. Quería que supieras que ha habido un cambio en la fecha de la siguiente presentación. Será el viernes 13 de noviembre en lugar del día 6.

Nattawin lo apuntó en sus notas para no olvidarse.
-Vaya. ¿Así que tenemos una semana más?

-Sí. Una persona del comité tuvo que tomarse unos días libres debido a un asunto familiar. Así que habrá que esperar un poco más después de esta ronda hasta que anunciemos la empresa que se quedará con el proyecto. No será hasta después de Navidad.

Sería una larga espera. En el calendario original estaba previsto que se anunciara antes de las vacaciones. Al parecer, Nattawin tendría que quedarse en San Diego al menos hasta enero. Entonces decidiría si Sterling
era un lugar donde tenía un verdadero futuro laboral o si sería mejor regresar a Thailandia.

-Muchas gracias por la información, Sandy.

-Es un placer, señor Sterling. Pero tengo otra información más, y me temo que no son buenas noticias. Sé que Sterling ha hecho la petición de poner el nombre de Johnathon Sterling al parque que habrá en la zona
del paseo marítimo, pero me temo que no será posible.
A Nattawin no le extrañó que no se lo concedieran, así que no le sorprendió.

-Lo entiendo. Es mejor saberlo ahora que más tarde. Gracias por avisarme.

-No hay de qué. Debo irme, pero supongo que hablaremos pronto.

-Adiós. -Nattawin colgó y supo que iba a tener que transmitir esa información a Mile. Lo mejor era hacerlo ya y acabar de una vez. Caminó por el pasillo hasta su despacho y se asomó al interior. Estaba en su mesa
de dibujo, de espaldas a la puerta, con los auriculares puestos. A menudo escuchaba música mientras trabajaba. Sobre todo jazz. Decía que le ayudaba a concentrarse.

Como no quería sorprenderle, dio unos golpes fuertes a la puerta, pero al parecer la música estaba demasiado alta. No le quedó más remedio que acercarse y tocarle el hombro. Él se sobresaltó. Agarró los auriculares
y se los quitó de la cabeza, dejándolos caer sobre la mesa.

-Nattawin. Me has asustado.

-Lo siento. Llamé a la puerta, pero no me oíste.

Él evitaba el contacto visual. Al parecer, las cosas iban a ser un tanto incómodas durante una temporada.

-¿Puedo ayudarte en algo?

-Sandy me ha llamado. La antigua asistente de Tara, ¿la recuerdas? -Ni te imaginas dónde está trabajando ahora. En la oficina de urbanismo del Ayuntamiento.

-Me alegro por ella. -Él se acercó a su escritorio y se sentó, encendiendo su ordenador.

-Creo que no me has entendido. Ahora tenemos línea directa de comunicación con ellos. Esperemos que eso signifique menos burocracia, lo que nos facilitará las cosas a ambos. De hecho, me ha llamado para decirme que el plazo se ha retrasado una semana por algunos problemas
internos.

-Supongo que eso es bueno.

Nattawin se sentía tan frustrado que tenía ganas de gritar. Estaba cansado de ocultar sus emociones. Así que puso ambas manos sobre su escritorio.

-¿Vas a mirarme, mile? ¿Vas a entablar una conversación de verdad conmigo?

Su mandíbula se tensó, pero finalmente él levantó la mirada hacia el.

-Nattawin, hago lo que puedo, ¿vale? Aunque creo que es mejor para los dos si mantenemos cierta distancia en el trabajo.

-Eso estaría bien si no estuviéramos trabajando en el mismo proyecto, pero lo estamos. Y de nuevo, como te dije en Los Ángeles, no hay que tomárselo todo tan en serio. Si hemos terminado, hemos terminado. Sigamos adelante. -Iba a tener que repetirse esas palabras
hasta que empezara a creérselas. Pero ese era un problema que se guardaría para sí mismo.

Mile se levantó de la mesa, miró al pasillo y cerró la puerta tras de sí.

Nattawin no pudo evitarlo, pero saber que estaban solos hizo que su estómago se volviera del revés.

-Miranda lo sabe -dijo él cruzándose de brazos.
-Espera. ¿Qué? ¿Cómo? -nattawin no podía imaginar cómo era posible que se hubiera dado cuenta aquella tarde que fueron a su casa.

Habían sido tan cuidadosos. Mile había hecho todo lo posible por mantener las distancias.

-No quiero hablar de eso ahora. No en la oficina. Hay demasiados ojos mirando. Tenía razón en eso.

-De acuerdo. Bueno, supongo que tampoco querrás decírmelo tomando una copa o cenando.

-Probablemente no sea una buena idea. -Él se pasó la mano por el pelo-. Hablemos a las seis, cuando la mayoría de la gente se haya ido.
Le diré a la niñera que se quede hasta tarde con Delia.

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Espero les guste la historia..deje sus votos..