Capítulo seis

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Durante la cena de la noche de sábado, Babe no dejaba de dar vueltas al tenedor sumergido en sus spaghetti.

...-Pit Babe...¿estás bien?- preguntó Charlie preocupándose.

-Si...si...claro

-¿Acaso no está rico?, puedo hacerte otra cosa si quieres

-No..no, esto está bien...es solo que estaba pensando

-¿Y qué estabas pensando?, ¿Puedo saberlo?

El piloto entonces posó su tenedor y miró fijamente a su joven novio, quién como siempre le devolvía la mirada con una tierna y perpetua sonrisa dibujada en su linda boca.

El piloto entonces posó su tenedor y miró fijamente a su joven novio, quién como siempre le devolvía la mirada con una tierna y perpetua sonrisa dibujada en su linda boca

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-Pensaba en ti...en mi...en nosotros

-¿De veras?, ¿Y qué era lo que estabas pensando?

Babe estiró su mano derecha hacia Charlie posandola sobre la mesa, entonces el más joven levantó la suya y las unieron.

-Te amo

-Lo sé, Pit Babe. Yo también te amo

-Si ya... pero quiero decir que te amo muchísimo. Como nunca he amado a nadie más

Charlie rió divertido.

-Lo sé... sé que me amas mucho. Me lo demuestras cada día

Babe negó.

-No como debería.... Charlie, sé que tengo un carácter horrible... te grito y a menudo te digo cosas que puedan parecer que no me importas pero te juro que....

-Pit Babe -le interrumpió Charlie ahora con su cara seria- tranquilo, yo sé cómo eres y jamás me he sentido mal por lo que me dices. Te he conocido así y no quiero que cambies... amo todo de ti

Babe sonrió y a continuación tiró del brazo de su novio para que se levantase y se sentase en su regazo.

-Eres tan malditamente lindo, tengo mucha suerte de tenerte...por favor, Charlie no me dejes nunca.... No dejes de amarme jamás....no podría vivir sin ti, tú eres mi todo

El más joven lo abrazó con fuerza y a continuación posó varios besos alrededor del hermoso rostro del piloto, hasta terminar en su boca.

-Jamás voy a dejarte...una vez te prometí que te cuidaría y te acompañaría hasta que te aburrieras de mi y pienso cumplirlo

-Eso jamás ocurrirá, Charlie. Nunca podría aburrirme de ti pero si temo que tú...

-Nunca, óyelo bien, Pit Babe...nunca voy a irme a ningún lado

Nuevamente estos se fundieron en un largo beso y un fuerte abrazo y al término de su cena, ambos se sentaron en el sofá para compartir varios besos y unas cuantas caricias más, entonces Babe se fue a su habitación, mientras Charlie se quedó fregando los servicios de la cena.

7. Pit Babe 2 - FinalizadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora