4. En bicicleta

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Se acomoda el cubre bocas, andando por el parque. Cuida de que no haya ninguna cámara cerca o que noten quien es él. Después de todo, le gustaría tener una cita privada. Es lo ideal. Llega a un punto dónde es obvio. Tiene lo que pensó, sería la mejor evidencia de que es el: su perro Doberman, Bam. Su perro, acostumbrado a su dueño y sus mañas, se queda sentado en un solo sitio. Oportuno considerando que Jungkook camina de derecha a izquierda, impaciente sin más. Llegó antes de la hora pactada. Demasiado ansioso y Bam inquieto fue una excusa de salir antes.

Se vistió y ¡Claro! Bam lo tomó como la hora de pasear. Así que ladraba sin control una y otra vez.

— ¿Siempre llegas tan temprano?

Gira sobre sus talones y sonríe, bajando la máscara que le cubre más de media cada. Jimin encoge de hombros, sonriente. Usa un abrigo negro con bordado de flores en las mangas y bolsillos. Contrasta con su suéter cuello de tortuga blanco. Un pequeño bolso cruzado en su pecho y el celular en la mano.

—Estaba a punto de llamarte, pensando que no iba a encontrarte tan fácil—admite divertido. Se agacha delante de Bam—. Que perro tan bonito- ¡UYYYUSHHH! —Jimin aprieta los dientes y sonríe, siendo lamido en toda la cara por Bam—, ¡Que adorable es! —Lo toma de la cara y lo acaricia mimoso. Bam mantiene la lengua afuera, jadeando.

Jungkook arruga la nariz y sonríe. Feliz de la reacción de Bam. No es un perro agresivo, por el contrario: es muy asustadizo. Si alguien no le gusta, huye y no se atreve a tocarlo o dejarse tocar. Que este tan manso con Jimin, tan solo confirma que es tal como lo recuerda.

Capaz de llevarse bien con cualquier animal callejero en su camino. Se endereza dando un salto.

— ¿Vamos por las bicicletas? Solo necesito que Bam no corra si vamos en ellas. —señala Jimin y Jungkook asiente.

—No le hace falta correr. Es muy rápido solo andando. Él puede—asegura confiado—. ¿Qué tal estos días en Seúl?

—Extraño ir a la costa si la gente se vuelve un fastidio—admite Jimin negando con la cabeza—, pero es bastante lindo. Es bueno tener tantos lugares a los que ir, diferentes tipos de escenario... Parece como todo lo que se habla.

—Incluyendo el caos de vida

—Sí, por desgracia.

Jungkook le da vistazos ocasionales. Delinea su perfil. La forma de su nariz, en que está peinado, su espalda recta y ojos pequeños fijos en el cielo nublado. Jungkook se aclara la garganta.

—No sé si te lo comenté, pero tengo un manager un poco... Tenso—Jimin ladea la cabeza—. Está preocupado, así que sería mejor si no sabe que estoy saliendo contigo. No tiene en buena estima a los gatos. —Jimin se detiene e inclina hacia Jungkook, buscándole la mirada. Sus ojos verdes fijos en los dorados. Jungkook enrojece por esta posición, el olor que claramente trata de provocarlo. Jimin ronronea, la forma en su garganta vibra hace a Jungkook dar un indiscreto jadeo.

Nos está probando.

Nos está provocando.

Quiere que hagamos otra cosa. Deberíamos tomar la oportunidad.

A los gatos les encanta hacerlo cuando muerden su cuello, por eso lo está ofreciendo. Es el momento oportuno.

Jungkook quisiera que su Alpha interno -o león interno-, deje de hacerlo empeorar su estado. Que sus hormonas de disparen de un solo golpe por la parte más superficial de su ser.

—Oh, entonces ¿Quieres que salgamos más? —pregunta Jimin en un ronroneo, curvando sus esponjosos y rosados labios.

—S-sí. Si me gustaría.

Out of Time || KookMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora