Maybe in another world - Kivi

Despertar

Pasaron el tiempo hablando sobre muchisimos temas, la conversación no paró en ningun momento, y tampoco era forzada.

-Oye, son las 9. ¿Te quedas a cenar?-Le propuso Violeta.

-It depend. ¿Sabes cocinar?

-Sí. Más o menos. ¿Te gusta el sushi?

-¿A quién no?

-Pues marchando sushi.

La pelirroja se dirigio a la cocina y saco el sushi que tenía guardado, y junto a algunos cubiertos los puso en la mesa con ayuda de Chiara.

-Está buenísimo.

-Gracias.

-Ni lo has cocinado tú, stupid.

-No, pero lo he comprado. Ya es un mérito.

-Mentira. Lo ha comprado Denna.

-Bueno, pero con mi dinero.-Ambas empezaron a reír.

Una vez terminaron de comer, Chiara recogió la mesa y mientras Violeta lavaba los platos, Chiara fue al salón a elegir una película. O eso creyó Violeta.

-Oye Chiara, ¿quieres quedarte...-No continuó la propuesta ya que al llegar al salón se encontro a una Chiara durmiendo. Se acercó hacia ella y se agachó a su lado retirandole algunos mechones.-Supongo que es un si. Eres muy bonita. -Dejo un beso en la mejilla de la menor.

-Eres especial y muy bonita, y nuestra...amistad, es muy bonita. No quiero hacerte daño, tengo miedo de al tenerte al lado y hacerte cercana a mi, salgas perjudicada. Prometo no ponerte en peligro.-Susurro la mayor en el oido de la contraria, para cogerla entre sus brazos como si fuese una princesa para tumbarla en la habitación más cercana a la suya.

Al día siguiente Chiara se despertó y se asusto al ver que no estaba en su cuarto, pero después recordó que ayer probablemnete se quedase dormida en casa de Violeta por el cansancio. Miró la hora y se levantó corriendo, las dos y media de la tarde.

-Mierda, mierda, voy tardísimo y tengo que ir a mi casa, joder, joder.-Comenzó a decir Chiara mientras salia de la habitación corriendo.

Llegó al salón y se encontro a una Violeta cocinando.

-Buenos días, he hecho la comida por si querias quedarte.-Dijo Violeta girandose al ver llegar a la menorquina.

-Shit. Violeta, me encantaría quedarme a dormir. Pero tengo que pillar rápido un taxi, a las 8 tengo un concierto y tengo que estar a las 5 allí para la prueba de sonido.-Dijo Chiara yendo a darle un rápido abrazo a la mayor.-No puedo pillar mi auto, o como me vean salir de aquí con mi coche, nos matan a preguntas.

-Que descuidada eres, eh. Deja, te llevo yo, me cambio rápido y voy.-Dijo la mayor, que no dejó responder a la otra, ya que fue a su cuarto a cambiarse.

-Venga, vámonos.-Cogio las llaves de la casa y del coche y se montaron en el lamborghini negro de Violeta.

-Pues si que tenias el mismo.

-Claro que si, yo no miento.-Dijo Violeta riendo.

-Eso dicen todas.

Llegaron a casa de Chiara, y esta le dijo que entrase que necesitaba ayuda para saber que ponerse, agradeciendo o maldiciendo que Martin y Ruslana seguramente ya estuviesen yendo, ya que habian dado las tres y media ya, y el concierto estaba en el centro de Madrid, y ellos vivian a las afueras y con el tráfico iban a tardar bastante.

La pelinegra, con ayuda de la pelirroja, se decantó por un vestido negro, ceñido al cuerpo bastante simple, pero perfecto.

-Venga va, te llevo ya que tengo aquí el auto.