Demonio

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Chiara levantó a Violeta y la llevó a la cama de esta, depositandola suavemente allí.

Sus manos comenzaron a subir empezando por los muslos, pasando por el abdomen, rozando los pechos y llegando al primer boton de la camisa, miró a la chica que tenia debajo suya, y al recibir un asentimiento con la cabeza comenzo a desabrochar con una lentitud algo desesperante para la mayor, hasta que llego al último y con una sonrisa egocéntrica, elevo la mirada y habló.

-¿Desde cuando quieres esto?

-Si no te miento, desde el primer día. Joder que guapa ibas ese dia.

Sonrió con superioridad y sin más, quito la camisa lanzandola a quien sabe donde de aquella habitación. Sus labios fueron a chocar con los de la contraria, para después iniciar un recorrido de besos y algunas marcas por el cuello, bajando por la clavicula hasta llegar a los pechos.

Comenzó masajeando uno con los dedos mientras su boca estaba con el otro, una de sus piernas se puso en medio de las de la contraria, empezando a hacer presion en su entrepierna, provocando pequeños supiros en Violeta.

Sus besos bajaron por el abdomen firme hasta llegar a la tira del pantalón, el cual comenzo a desabrochar y saco fácilmente. Su boca volvio al abdomen donde comenzo a dejar más pequeñas marcas rojas y uno de sus dedos rozo la intimidad de la pelirroja sobre la ropa interior y comenzo a frotar suavemente, consiguiendo los primeros gemidos de la noche.

-Eres preciosa, Violeta. Ante mis ojos, eres perfecta. Me da igual que los demas no lo vean, yo lo veo y espero que tú también te veas como yo, y si no es asi, me esforzaré para que sea así.

-Chiara...por favor.

Chiara con dos dedos bajo la ultima prenda que habia en el cuerpo de la mayor y sin demorarse mucho más, aprovechando que ya estaba bastante mojada, metio dos de sus dedos y comenzo a moverlos, aumentando la velocidad y la intensidad progresivamente. Sus labios subieron a los de la contraria para besarla, con amor, trasmitiendose todo lo que sentian pero que no verbalizaban.

Volvio a bajar, para hacer que la mayor llegase al extasis, comenzo a lamer el clitoris de la mayor y esta comenzo a soltar gemidos mucho mas sonoros

-Chiara...yo...

-Hazlo.

Y sin mucha más espera la pelirroja acabó con la pelinegra entre las piernas aún agarrando oxigeno.

-¿He superado a las demás?

-Eres la primera que me hace el amor, Chiara.

-Eres la primera a la que se lo hago. Te quiero, Violeta Hódar.

-Yo también te quiero, Chiara Oliver.-Sus labios se posaron en los de la contraria, felices por que por fin habian dicho lo que llevaban guardandose bastante tiempo.-Pero creo que ahora te toca a ti, ¿no crees?

Y entre besos, caricias, abrazos y palabras, se fundieron ambas desmostrandose todo el amor que sentian por la otra.




La luz del sol mañanero se colaba a la habitacion dando de lleno en los ojos de la menor, la cual solo solto un quejido y se dio la vuelta para quedar boca abajo y evitar que la luz del sol la molestase.

Unas finas manos comenzaron a acariciar lentamente su espalda desnuda y poco a poco fue abriendo los ojos.

-Buenos dias, Kiki.-Dijo la mayor al ver que abria los ojos al completo. La nombrada, se quedo mirando a la pelirroja para luego sonreir y dejar un pequeño beso en los labios de la pelirroja.

-Buenos días, Vio. ¿Que tal has dormido?

-Mejor que nunca, hacia tiempo que no dormia tan bien.

-¿Si? Pues descansar es muy importante, asi que tendre que venir más a menudo a ayudarte a dormir.

Maybe in another world - KiviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora