-No me puedo creer que ella haya negado que tiene una aventura con otro hombre aún cuando le mostraste la evidencia de su infidelidad. Me hace pensar que es una persona fría y calculadora.
Se expresa su acompañante a la vez que le entrega un vaso con wisky al joven Anthony, quien se encontraba ofuscado por el disgusto; tras recibir el recipiente deposita un beso en su mano para agradecerle, sabe que es la única persona que puede comprenderle en esos momentos. Todavía está muy molesto porque ha descubierto que su esposa se ve con otro, no puede consentir que siga con ese comportamiento desvergonzado.
Tras haber enfrentado a Candy decidió ir a verse con esa persona que sabía podía comprenderlo perfectamente, ella lo ha recibido con dulzura sin ocultar su sorpresa, estaba muy angustiada por saber qué era lo que sucedió cuando ella fue acusada de tener un amante, por lo que ahora sólo podía intentar buscar las palabras adecuadas para animarlo o que le ayuden a ver la verdad. Así que continúa diciendo:
-Lamento tanto que estés atado a una mujer que realmente no te ama, sólo está contigo por ambición al dinero.
-Yo tampoco puedo creer que en verdad Candy haya sido capaz de todo eso.
-Al menos ahora sabes la realidad y de todo lo que ella es capaz, ya no puedes seguir comportándote como un ciego. Hace uso de su belleza para parecer inocente y que todos se pongan de su lado... incluso a mí me engañó, pero que sepas que siempre estaré de tu lado, te apoyaré en lo que decidas.
-Te lo agradezco tanto, sabes perfectamente que cuando estoy a tu lado me siento en paz... se me olvidan las cosas y los problemas.
-Lo único que deseo es poder complacerte, te lo mereces. Eres un gran hombre. Puedes contar conmigo para lo que sea y cuando quieras. Anthony.
-Te prometo que nunca haré algo que te hiciera daño, eres muy importante para mí.
Admite a la vez que vuelve a depositar otro beso en el dorso de su mano mientras que con la otra ella le acaricia la rubia cabellera; él da otro sorbo más a su bebida y se deja engullir por esa paz momentánea que siente con esa compañía y las horas del reloj continúa su parsimonioso ritmo.
Con los primeros rayos del sol la señora Andrew se levanta de la cama y le pide ayuda a su mucama para vestirse. En el comedor ya se encuentra la tía tomando el desayuno, le saluda con un beso en la mejilla y toma su lugar para poder intentar ingerir algún alimento. Cuando de presto escuchan la llegada de un vehículo y segundos después la entrada principal abrirse.
Las mujeres esperaron en sus lugares pacientemente a que Anthony apareciera, había subido a tomar una ducha y cambiarse de ropa antes de ir a trabajar. Finalmente pasa por el comedor a sabiendas que Elroy y Candy estaban ahí, el mayordomo se lo ha notificado y no podía marcharse sin despedirse de su tía.
-Buenos días tía.
-Buenos días Anthony... dime ¿A caso no piensas saludar a tu esposa? ¿Qué clase de modales son esos?
-Tía...
-Anda, no me hagas repetirlo otra vez.
Y a regañadientes el joven se acerca a su esposa y le deposita un beso en la mejilla, Candy no dijo palabra alguna.
-Anthony, no recuerdo haberte enseñado esos modales y que yo sepa en Londres no educan de esa manera, pero...
-Tía por favor...
-De "favor" nada Anthony. Sé que es normal que en un matrimonio hayan ciertas desavenencias, y son esos problemas los mismos que ayudan a afianzar la relación, una vez ya superados. Pero de ahí a tratar a Candy en la forma en como lo hiciste ayer está muy lejos de lo aceptable. Por lo que será mejor que le des una disculpa a ella por tu comportamiento inadecuado.
-Tía, le suplico que por favor no se meta en ésto. No sabe de lo que está hablando.
-¡Claro que lo sé muy bien! Crees que Candy tiene un amorío con el señor Smith, por favor, qué pensamiento más absurdo.
-Por lo visto no has tardado en poner de tu parte a la tía Elroy. Estupendo.
-¡Insolente! Solamente me estoy poniendo del lado de la verdad, y soy lo suficiente mayor para poder darme cuenta que estás obrando mal. Para tu información, el señor Smith es quien se encarga del patrimonio de tu esposa; tras el fallecimiento de María y Robert Wright, fue Smith quien ha estado velando por los intereses de Candy para proteger la herencia que le dejaron sus padres. Y si de repente a aparecido es porque ha recibido la oferta sobre la casa en Escocia, donde ella vivió con sus padres. Hasta ahora había sido William quien se encargaba directamente con Smith de todas éstas cosas, pero éste le dijo que hablara personalmente con tu esposa, ahora Candy es adulta y está casada contigo, si hubieses estado aquí y no en viaje de negocios te habrías enterado de primera mano.
-Tía yo... yo no tenía idea.
Admite completamente sorprendido, recordaba vagamente que escuchó alguna vez a la tía Elroy hablando con el señor Jhonson sobre algunos detalles económicos que se habían hecho en nombre de Candy, y sabía que ella siempre había recibido una asignación desde que llegó a la familia, pensaba que eran los Andrew quienes hacían eso, pero tras su boda seguía recibiendo una dote aún mayor. Nunca prestó atención o importancia a ello, ni siquiera lo recordaba, si no es porque su tía lo acaba de mencionar; Elroy continúa su reprimenda.

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SEÑORA
FanfictionCandice es una esposa devota y fiel, quien pronto se enfrenta a serios problemas en su relación con Anthony debido a su amante. Muerte, intriga, manipulación y ambición azotan a la señora Andrew hasta que finalmente decide hacerse a un lado y seguir...