𝘛𝘳𝘦𝘤𝘦 (²/²)

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Aquel chico se había despertado de golpe, otra pesadilla de nuevo.

Lentamente camino hasta la cocina sirviéndose un vaso de agua, se sentía aún abrumado, no solo de su hija sino también por qué el juez le había dicho...

Una madre, ¿De dónde sacaría una?, no tenía ni la menor idea.
Decidió llamar a un mejor amigo Carre Lara preguntarle.

— Mira, hoy iré a una fiesta, tal vez hayan minas.— explico su amigo.

El rulado acepto sin muchos ánimos. Ahora solo quedaba pedirle a su madre que cuidara a su hija todo el día y toda la noche.

"Ma ¿podés cuidar a ______ todo el día?"

Escribió el chico, apagó su celular pero rápidamente vibro.

"Si claro, no te preocupes hijo"

Escribió la madre, Spreen suspiró aliviado de que su madre pidiera cuidar a su hija.

Por otra parte, solo se podía ver a Victoria responder aquel mensaje para después apagar el celular con la niña en brazos.

— Te vas a quedar toda la noche conmigo.— decía Vicky de forma chillona pero cariñosa — No le digas a nadie ¿Ok?— pidió.

Aquella niña pequeña simple con sus manos hacia un gesto de que cerraba su boca como un cierre.

— Perfecto.—

...

En aquella fiesta aquel chico no se sentía cómodo, o simplemente era la falta de tiempo que le dedico desde que nació su hija. Había dejado de ir a fiestas, algunos, eventos, etc.

Estaba tomando con su amigo un refresco, no quería tomar mucho pues sabía que si regresaba a la casa y peor, sí su madre lo veía así, no se la acabaría con su madre.

Ya hasta escuchaba los regaños mentalente.

Aquel chico camino con su amigo cuando accidentalmente choco con una chica.

— ¡Upp!— se quejo — Lo siento.— exclamo rapidamente pues había regado su refresco en su ropa.

— Na tranqui tranqui.— decía el chico tratando de tranquilizar la situación.

Aquellas dos personas se miraron por un momento para después...


En aquella casa del chico, se encontraba Vicky, sus padre se habían ido a descansar temprano, mientras que la niña y la tía jugaban.

— ¿Aver que hace mi hermano cuando está despierto?— pregunto la chica mientras dibujaba con su sobrina.

— Existir.— respondió simple aquella niña — Y comer.— explico.

Vicky lo miró sumamente obvio pero decidió no darle bola.

— Bueno, ¿Y que hace cuando vos estás dormida?— pregunto de nuevo.

Aquella chica esperaba un "no sé" o un simple "nada dormir", pero su respuesta impactó mucho a la chica.

— Llorar.— respondio de nuevo con simpleza mientras dibujan lo que había enfrente de ella.

Micha.

¿Llorar? Se preguntaba la hermana, Victoria quedó callada por unos segundos antes de armar su teoría.
Vicky decidió irse por la más fácil, no había superado la muerte de Clarisie, lo más seguro es que seguía dolido.

— ¿Cómo sabes que Iván llora si estás dormida?— pregunto ahora Vicky tratando de armar el rompecabezas.

— Lo escucho en la cocina cuando voy por agua.— respondio la pequeña — Tía Vicky ¿Quién es Clarisie?— pregunto la pequeña con suma curiosidad.

— Clarisie bueno...


Risas se escuchan en aquel lugar afuera de la fiesta, era Spreen mientras reía con su nueva amiga de nombre  Karla.

— ¿Posta?— preguntaba el chico entre risas después de escuchar aquella historia.

— Te lo juro.— respondió la chica mientras tomaba un poco de su cerveza.

Aquellos dos quedaron en silencio con una ligera sonrisa.

— ¿Cómo dijiste que te llamabas?— pregunto de nuevo la chica.

— Iván.— respondió de nuevo.

Habían pasado horas hablando era como si hubieran conectado al instante, tenían gustos parecidos, para Spreen ella tenía un gusto parecido al de Clarisie, no sabía por qué pero se sentía muy igual.

— Mañana tengo libre ¿Qué querés hacer?— pregunto la chica mientras tomaba su cerveza.

— Yo... Cuídate a alguien.— explico.

— ¿A enserio?— pregunto la chica interesada por la situación — ¿Así como en plan niñera?— cuestiono recibiendo un sí dudoso de Spreen.

— Sí algo así...— respondió mientras se rascaba la nuca — ¿Por qué preguntas?—

— ¿Te puedo ayudar?— pregunto aquella chica de cabello castaño.

Mientras tanto Spreen la miro confundido ¿Por qué querría?.

— ¿Estás segura?— pregunto — No quiero obligarte.— explico.

Tal vez, no sería tan mala la idea de que Karla la ayude, pero de igual forma no quería darle carga o al menos no tanta como la que él tenía sobre la pequeña.
Hablando de la pequeña, spreen aún no se sentía listo para decir que esa pequeña era su hija, la amaba y mucho, pero prefería mantenerla de perfil bajo hasta donde pudiera, o bueno lo que queda.

Pues la última vez, aquella señora había filtrado de que el chico tenía una niña, ya no eran teorías eran rumores que poco a poco se transformaban en situaciones verdaderas.

— Te vas aburrir.— negó el chico recibiendo una mala mirada por parte de la chica.

— ¿De que hablas sorete?— regaño dando un leve golpe en el hombre de rulado — Yo adoro a los nenes en especial si son niñas.— explico — Solo mirá sus caritas, ¿O te dan pena?.

— ¿Qué? No.— exclamo el chico negando — Bueno si querés ya, ve.— dijo restándole importancia.

— ¿Entonces me darás tu número?— pregunto levantando la mano recibiendo una mirada de desconfianza por el chico — Para poder saber dónde será.— respondió.

Aquel chico saco su celular dándole su número sin muchos ánimos, lo único que hacía era pensar en que pasaría si llegaba a describir que esa niña es su hija...

De repente una llamada llegó a aquel celular, era Carré, ya se iba.

Aquel chico quien había venido con su amigo se despidió de la chica con un beso en la mejilla para después irse de aquel lugar en donde ambos estaban.

Se sentía bien estar con alguien tranquila.

— ¿Hola? ¿Mamá?— murmuró la chica — Ya tengo a Iván cómo dijiste, es un idiota de por medio.— río — Mañana veré a esa niña que tanto quieres Lucia...

✓// 𝐒𝐏ᛁ 𝘚𝘐𝘕𝘎𝘓𝘌 𝘍𝘈𝘛𝘏𝘌𝘙Donde viven las historias. Descúbrelo ahora