Si tú bailas, yo bailaré. Y si no lo haces, bailaré de todos modos.
Dale una oportunidad a la paz. Deja que el miedo que tienes desaparezca.
Tengo mis ojos puestos en ti.
Lana del Rey - Say Yes To Heaven.
Damiano sonríe bajo sus oscuras gafas, mostrando su perfecta dentadura. Puede sentir su corazón chocar desenfrenado contra su pecho, pero lo ignora, como cada vez que Adonis está en su mente.
Sólo lo ignora.
—Quiero más que eso —su voz es profunda, con su mano levanta sus gafas descubriendo sus ojos, fijando su mirada en la ajena, con profundidad—. Quiero una realidad contigo, quiero un cuento de hadas, lo quiero todo.
Adonis se queda inmóvil.
Su corazón late descontrolado mientras siente sus mejillas arder. Se ha quedado sin palabras, se ha quedado sin saber qué hacer, pensar o decir.
—¿Cuánto sería por toda una vida juntos? —cuestiona Damiano con sonrisa amable, sus ojos brillan y su voz es profunda.
—¿Una vida? ¿Qué?
Damiano mira atento su rostro, analizando las expresiones de confusión y sorpresa que están plasmadas sobre éste. Sin poder contenerse más, comienza a reír divertido, bajando nuevamente sus gafas y cubriendo sus ojos.
Adonis lo fulmina con la mirada, sintiéndose engañado y algo molesto.
—En realidad, quiero la aventura de una semana.
—Habla claro, D’Angelo —escupe Adonis molesto, sin admitir que su corazón dolió un poco en el momento en el que lo escuchó reír.
—Te tengo una propuesta de negocios.
—¿Qué quieres? —cuestiona Adonis aún molesto.
—Quiero que pases una semana conmigo —contesta Damiano tranquilo.
—¿Una semana? ¿Yo? —su voz ahora denota curiosidad e incredulidad.
—Sí y sí. Quiero contratarte como empleado, Adonis. ¿Podrías considerar brindar tus servicios toda una semana para mí? Sólo tienes que viajar conmigo a Tailandia, concretamente a Bangkok. Todo estará incluido, no tendrás que poner mucho de tu parte, sólo necesitaré de tu compañía, sin sexo ni nada más. Sólo compañía.
Adonis ríe nervioso y lo mira divertido, olvidando por completo su molestia.
—Te pagaré para que seas mi acompañante, ¿no quieres? —Damiano necesita de él, no puede dejarlo negarse. Necesita persuadirlo a como de lugar.
—Quisiera ser tu acompañante D’Angelo, pero tú eres rico y galán, podrías conseguir por todos lados miles de mujeres y hombres y no precisamente en una esquina... ¿Por qué yo? —dice incrédulo—. Podrías tener a cualquiera, a quien tú quieras...
ESTÁS LEYENDO
El caos que implica amar ©
Dragoste"¿Cuánto costaría toda una vida a tu lado?" [...] Una noche, un callejón. Un hotel de lujo, una suma de dinero, un alma rota y otra vacía. Zander Benson sobrevive sus días bajo una máscara llamada Adonis, una figura enigmática cuya habilidad para e...